Gromiko mantiene sus compromisos en París y Madrid
La grave tensión internacional desencadenada a raíz de la destrucción en vuelo del jumbo surcoreano no afectará a la agenda del ministro de Asuntos Exteriores soviético, Andrei Gromiko, que el martes próximo se entrevistará en París con las autoridades galas y el miércoles debe de asistir en Madrid a la prevista sesión de clausura de la Conferencia sobre Seguridad y Cooperación en Europa (CSCE), durante la que podría encontrarse también con su colega nortearnericano, George Shultz.Ayer por la mañana, el consulado español en Moscú estampó los correspondientes visados en los pasaportes de Gromiko y del séquito de cerca de 40 personas -entre ellas, un médico y dos tripulaciones de Aeroflot- que le acompañarán durante su estancia en la capital española.
F
B.,
En círculos oficiales soviéticos se daba a entender ayer que no había ninguna razón para cambiar los planes del jefe de la diplomacia soviética.
En ambientes occidentales se pronosticaba que Gromiko no variará su apoyo al proyecto de resolución final de la CSCE -tal y como estaba previsto en un principio- y se limitará, en el peor de los casos, a soportar con su estoicismo habitual el chaparrón de críticas occidentales que le puede caer encima el miércoles.
De todos modos, en los mentideros occidentales de Moscú se subrayaba la fatalidad de que el incidente del jumbo surcoreano se haya producido, precisamente, cuando parecían despuntar los primeros indicios de reanudación del diálogo entre Washington y Moscú.
El moderado optimismo con el que algunos observadores contemplaban el inmediato futuro de las conversaciones de Ginebra sobre armas de alcance medio se sumaba al hecho, no carente de simbolismo, de que, hace tan sólo una semana, un funcionario norteamericano con rango de ministro visitara -por primera vez en cinco años- la capital soviética para firmar un acuerdo para la exportación de grano. Estos indicios habían llevado a creer -antes de que el jumbo surcoreano desapareciera en pleno vuelo- que el miércoles, en Madrid, tras la entrevista Gromiko-Shultz podría iniciarse el prólogo de una nueva edición de la distensión.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.