Belaúnde pide la reinstauración de la pena de muerte en Perú para combatir el terrorismo

En su mensaje al Congreso con motivo de la fiesta nacional peruana, el presidente, Fernando Belaúnde Terry, confirmó el jueves la previsión de los observadores políticos y elevó formalmente al poder legislativo su petición de que sea reinstaurada la pena de muerte, abolida en la Constitución de 1979, para castigar los delitos de traición a la patria.

Esta petición coincide con los acontecimientos registrados en el país en los últimos meses: un recrudecimiento de los atentados terroristas, un motín policial y el creciente temor a un golpe de Estado.Por otra parte se ha replanteado la estrategia global contra el terrorismo, que ha dado como resultado un intenso despliegue de unidades militares en la propia Lima, cuando, hasta ahora, el papel del ejército se había visto limitado a las provincias andinas colindantes con la localidad de Ayacucho, principal zona de operaciones de la organización guerrillera maoísta Sendero Luminoso.

Con la regularización de la guerrilla urbana por parte de los senderistas, la aparente incapacidad de las fuerzas policiales para combatir el terrorismo ha sido duramente criticada por los sectores de la oposición parlamentaria al Gobierno.

Más armas para la policía

En relación con este tema, el ministro peruano del Interior, Luis Percóvich, ha anunciado la adquisición de nuevos equipos y armamento para las fuerzas policiales, y una redefinición de la lucha contra los guerrilleros de Sendero Luminoso.En los últimos atentados senderistas, perpetrados contra un centro de vacaciones y dos fábricas de bebidas que fueron destruidos el pasado martes en el departamento de Ayacucho, se han producido daños por valor de 200.000 dólares (cerca de 30 millones de pesetas), según fuentes del mando político militar de la zona de emergencia.

El centro de vacaciones, situado en la provincia de La Mar, a 30 kilómetros de Ayacucho, era propiedad del diputado José Parodí miembro del partido gobernante Acción Popular.

El Gobierno peruano decidió el pasado jueves prorrogar dos meses el estado de emergencia, cuando se cumplían los 60 días de la primera promulgación a raíz de la creciente escalada terrorista que se viene produciendo en los departamentos de Ayacucho y Lima.

El Gobierno ha reiterado a través del presidente Fernando Belaúnde, su voluntad de combatir el terrorismo con los mecanismos que le otorga la Constitución.