La Junta controlará las inversiones de las diputaciones

El Gobierno andaluz ha dado un paso importante en la consolidación del poder autonómico, al lograr el visto bueno de los presidentes de las ocho diputaciones provinciales a un documento que faculta al Ejecutivo autónomo a controlar las inversiones de estas corporaciones. El tema fue objeto en el pasado de enfrentamientos soterrados entre la Junta de Andalucía y las diputaciones que dirigía la UCD.En virtud del documento mencionado, que han suscrito los presidentes socialistas de las ocho diputaciones, el Consejo de Gobierno andaluz será el que apruebe los objetivos, prioridades y directrices de los planes provinciales de obras y servicios para 1984, cuyo cumplimiento será seguido por expertos de la Consejería de Gobernación.

Una vez dictados objetivos y prioridades por el Ejecutivo autónomo, el procedimiento a seguir será el siguiente: las diputaciones reciben las peticiones de obras de los ayuntamientos, elaboran y aprueban en pleno sus planes, y éstos han de pasar nuevamente por manos del Gobierno regional, concretamente tendrán que ser ratificados por la Consejería de Gobernación, siempre que se adapten a las directrices gubernamentales previas. La propia Consejería de Gobernación llevará el seguimiento de los planes.