Querella contra dos médicos por retraso en la intervención a un paciente que falleció
El Juzgado número 14 de Madrid instruye diligencias en relación con la querella de los familiares de Alfonso Díaz López, que murió el 19 de mayo del pasado año en el hospital Ramón y Cajal, cuando contaba 61 años, contra los médicos Alfonso Epeldegui y Jesús Señor de Uría, por presunto homicidio a causa de una negligencia, al haberse producido una demora en la intervención quirúrgica que precisaba el enfermo, ha informado la agencia OTR Press.El paciente, Alfonso Díaz, ingresó en en hospital Ramón y Cajal, popularmente conocido como Piramidón, el 17 de mayo de 1982. Presentaba una lesión de válvulas y coronarias y procedía del hospital Clínico de San Carlos, de donde había sido enviado, al parecer, con una recomendación de extrema urgencia.
Pese a ello, el paciente sólo fue intervenido el 19 de mayo, dos días después de su ingreso, y falleció antes de que terminara la jornada. La decisión de presentar una querella contra los dos médicos mencionados fue adoptada por los familiares de Alfonso Díaz después de tener conocimiento de un reportaje publicado en el semanario Interviú en el que se describía la anómala situación del servicio de cirugía cardiaca del Piramidón cuando se encontraba bajo la dirección de Cristobal Martínez Bordiú, marqués de Villaverde y yerno del general Franco.
El reportaje aludía al caso de Alfonso Díaz, al que citaba únicamente por sus siglas, y aseguraba que la decisión de programar la intervención quirúrgica de este paciente para dos días después de la fecha de su ingreso había escandalizado al cuadro de médicos del servicio. El doctor Martínez Bordiú fue expedientado y apartado de su responsabilidad como consecuencia de una investigación suscitada por otro caso similar. Los familiares de un paciente denunciaron retrasos injustificados en la intervención del enfermo, que finalmente falleció.
