Un Miró alcanza los 214 millones de pesetas, en una subasta celebrada en Londres
Una obra de Joan Miró alcanzó los 214 millones de pesetas en una subasta celebrada anteayer en Christie's de Londres, una cifra que se considera record para el artista catalán. La obra mejor pagada fue una del artista holandés Piet Mondrian adquirida por un coleccionista privado japonés en 312 millones de pesetas, el precio más alto jamás pagado por una obra de arte abstracto.
La obra de Mondrian se titula Composición en rojo, azul y amarillo; fue pintada en 1930 y está considerada como uno de los mejores ejemplos del período de madurez del pintor holandés. Una pintura suya de su época anterior fue vendida por unos 145 millones de pesetas en 1982, en lo que entonces se consideró como una cifra especialmente alta.La subasta celebrada en Christie's incluyó la colección de Armand P. Bartos, un arquitecto húngaro que vive en Nueva York que compró Composición en rojo, azul y amarillo en los años cuarenta a un precio que los subastadores estimaron cercano a los 1.000 dólares de entonces. Otra obra que Bartos compró personalmente a Mondrian en 1942 en Nueva York, mientras ambos vivían en el exilio durante la segunda guerra mundial.
La obra de Joan Miró titulada El puerto, también de la colección Bartos, superó los 214 millones de pesetas y fue adquirida por un coleccionista privado de Londres. Una obra sin título de Rothko fue vendida por unos 58 millones de pesetas. El precio más alto pagado por un cuadro de Miró antes de esta subasta fue de 67 millones de pesetas, mientras que el Rothko más valorado con anterioridad alcanzó 39 millones de pesetas.
"Las pujas por la obra de Mondrian fueron extraordinarias, porque es un pintor con un gusto muy especial. Satisface ver que se paga un precio tan importante por una gran pintura de este carácter", dijo Christopher Burge, director de Bellas Artes de la empresa Christie's en Nueva York. "Nosotros esperábamos igualmente un alto precio por el cuadro de Miró y lo logramos", añadió.
El comprador de Composición en rojo, azul y amarillo fue Shigeki Kameyama, de Tokio, quien, limpiándose su sudor con un pañuelo, señaló que pretendía colgar el cuadro de Mondrian en el estudio de su casa. Y mostró su interés por hacer que esta compra suya haga tan importante a Mondrian en Japón como lo es hoy en Nueva York, por ejemplo.
La obra de Miró fue pintada por el artista español en 1945, cerca de Barcelona. Ha sido descrita por Chr¡stie's como la representación de "cinco figuras llenas de un humor delicioso", que están descritas como figuras amébicas que se juntan y generan otras en un ritmo circular. Se estima simbólica de la obra de Miró, uno de los más importantes pintores españoles vivos, cuya obra de los años 20 se vio recientemente en Barcelona y puede verse ahora en el Museo Español de Arte Contemporáneo de Madrid.
La obra de Mondrian vendida en la subasta está considerada como uno de los mejores ejemplos del arte geométrico del pintor holandés, que en los años 30 alcanzó el punto culminante en la búsqueda de la sobriedad y la pureza.
El coleccionista que puso su obra a subasta quiso que ésta se celebrara en Londres porque quería evitar la publicidad que el hecho hubiera alcanzado en Nueva York, donde vive.
En total la subasta logré superar levemente los 911 millones de pesetas e incluyó obras de artistas contemporáneos de categoría similar a los restantes, entre ellos Ben Nicholson y Fernand Leger, que lograron precios ligeramente inferiores. Una obra de Nicholson se vendió por 18 millones de pesetas. Y un cuadro de Leger, por casi 85 millones de pesetas.
Babelia
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