Ricardo Gullón destaca la vinculación de artistas y escritores con Cantabria

La programación de verano de la Fundación Santillana fue inaugurada ayer en Santillana del Mar (Cantabria), con una conferencia del profesor Ricardo Gullón, en la que analizó la obra de los escritores cántabros José María de Pereda y Marcelino Menéndez y Pelayo y de los poetas José Hierro, José Luis Hidalgo y la generación de Proel.

Ambos escritores se encuentran relacionados -el primero sitúa la acción de su novela más conocida, Peñas arriba, en la casona de Tudanca- con una de las exposiciones, precisamente la dedicada a José María de Cossío. Las cuatro exposiciones inauguradas permanecerán abiertas durante los meses de julio y agosto.Artistas actuales de Haití; Antología de maestros pintores de Cantabria, que abarca desde las obras de Madrazo a las de Antonio Quirós, pasando por el homenaje al pintor recientemente fallecido Manuel Raba; José María de Cossío y la casona de Tudanca, y Cultura de Julio L. Hernández, conforman la programación de verano de la fundación que recoge, como en ediciones anteriores, el triple objetivo de esta: el acercamiento a la cultura cántabra, a la nacional y a la hispanoamericaria.

El profesor de la universidad de Chicago, Gullón, inició su intervención señalando que "hablar de cultura en Cantabria es empresa sencilla, porque esta región, que ha sido dotada con la gran belleza de su paisaje, parece como que ha impulsado una actividad cultural continuada y nunca interrumpida". En primer lugar se refirió el conferenciante a la obra de José María de Pereda, en la que dijo se representan de forma idealizada lo que ha sido esta tierra que el escritor llamaba la Montaña y ahora se denomina Cantabria. En su opinión Pereda, del que ahora se cumple el 150 aniversario de su nacimiento, "era un oído que trasladaba la palabra oída a la palabra escrita. Creó", añadió, "un lenguaje popular, pero pasado por lo literario".

Para el conferenciante, leer hoy a Pereda evidencia que cuando habla de Cantabria lo hace con autoridad. Prosiguió su intervención refiriéndose a las relaciones existentes entre los escrítores de su época; entre Pereda y Benito Pérez Galdós o Marcelino Meriéndez Pelayo y Leopoldo Alas Clarín, afirmando que pese a sus diferencias de carácter ideológico, se encontraron en permanente relación".

Por su parte, el presidente de la Fundación Santillana, Jesús Polanco -al que acompañaban en la presidencia José Antonio Rodríguez, jefe del Ejecutivo cántabro, y el alcalde de Santillana del Mar, Javier Rosino- hizo un balanee de las actividades desarrolladas por la fundación desde julio de 1981. En relación con las exposiciones inauguradas, destacó la dedicada a José María de Cossío y la casona de Tudanca -en la que, afirmó, se "ven más cosas que en la casona o, al, menos, de forma más fácil"- así como la dedicada al escultor Julio L. Hernández.