El reformismo de la 'troika' dirigente china marcará la 6ª Asamblea Nacional Popular
La sexta Asamblea Nacional Popular china (ANP, Parlamento) inició el lunes sus 17 días de discusiones. Este pleno parlamentario se celebra a los nueve meses del 122 Congreso del Partido Comunista Chino, cuyas orientaciones reformistas, simbolizadas por la troika Deng Xiaoping, Hu Yaobang y Zhao ZIyang, marcarán profundamente los trabajos de la ANP. De esta asamblea ha de salir nombrado el presidente de la República, cargo eliminado por la revolución cultural.La primera muestra de esta continuidad entre los dos congresos la constituyó el informe leído por el jefe del Gobierno. En su intervención, Zhao ZIyang hizo un llamamiento a una "reestructuración gradual" de la economía, cuyo objetivo es "crear paso a paso un nuevo sistema económico adaptado a las condiciones de China y construir un socialismo adaptado a las características chinas particulares".
En política interior, la medida más destacable anunciada por el primer ministro chino fue la próxima creación de un Ministerio de Seguridad del Estado que, con autonomía de los servicios de policía y de seguridad pública, estará destinado a "proteger la seguridad del Estado y a reforzar el trabajo del contraespionaje".
La intervención de Zhao sobre la política exterior estuvo marcada por su ponderación, tanto con respecto a la URSS como frente a Estados Unidos, actitud que no supone un abandono de las posiciones mantenidas hasta ahora.
A propósito de las relaciones con la URSS, Zhao, ZIyang eludió toda referencia a los obstáculos que impiden la normalización, y prefirió manifestar que, para mejorar las relaciones entre ambos países, el primer paso por parte soviética debería ser que Moscú "suprimiera la amenaza real que hace recaer sobre la seguridad de China", una referencia lo suficientemente vaga como para que en ella quepa de todo.
Con respecto a Estados Unidos, Zhao fue particularmente circunspecto, limitándose a reiterar el interés que Pekín concede a sus relaciones con Washington y condenando, una vez más, la venta de armas norteamericanas a Taiwan
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