La remuneración de los asalariados públicos aumentará un 15,5% en 1983

En casi 500.000 millones de pesetas, equivalentes a un aumento del 15,5%, crecerán este año los costes de personal para el sector público. Según datos estimados por primera vez con carácter global, las remuneraciones salariales públicas se aproximarán a 3,2 billones de pesetas, sobre un total del gasto que rondará los 10 billones de pesetas. Las cifras han sido enviadas al Parlamento dentro de la documentación de los Presupuestos del Estado para 1983, pero han pasado inadvertidas hasta ahora.

Ni la CEOE ni los grupos parlamentarios de oposición, que tuvieron acceso a todos los documentos antes del Pleno de esta semana, han esgrimido en sus críticas este caudal informativo. Sus referencias a los sueldos se han limitado a los pagados por el Estado y la Seguridad Social, que suponen apenas la mitad del total.Sin embargo, la ampliada documentación, aunque todavía exige grandes esfuerzos de desbroce y en algunos casos es aproximativa, permite acercarse a la desconocida realidad del sector público, que se cree formado por casi dos millones de trabajadores. Por primera vez, las Cortes han podido conocer también datos y estimaciones de los 110 organismos autónomos, el centenar y medio de empresas o entes públicos con mayoría estatal, y los miles de ayuntamientos y entes territoriales.

Además del Presupuesto Consolidado de las Administraciones Públicas, que supera en gastos los 7,4 billones de pesetas, Hacienda facilitó previsiones de empresas y entes territoriales, cuyos presupuestos no deben ser aprobados por el Parlamento. El propio titular del departamento, Miguel Boyer, se refirió de pasada en su largo discurso, a que el sector público gastará 9,813 billones de pesetas en términos de Contabilidad Nacional, en tanto que ingresará 1,33 billones, lo que arroja un déficit de 1,33 billones. Pero el líder del Grupo Popular, que podría haber ilustrado mejor su intervención con estos datos, utilizó como máximo exponente de las maldades del sector público los 7,4 billones conocidos hasta ahora.

Igualmente, nadie utilizó la documentación remitida por el Gobierno para responder a la advertencia de Boyer sobre el aumento medio de los salarios de convenio para este año -11,6%-, algo superior a 1982, pese a que la inflación bajará dos puntos. Las pocas alusiones a las subidas salariales del sector público se centraron en criticar que el Gabinete las negociara con los funcionarios antes de llevar los presupuestos al Parlamento (Miguel Bravo de Laguna, del Grupo Centrista, ex subsecretario de Presupuestos), o en considerar alto el 12% de subida pactada (Grupo Popular).

Poder adquisitivo

También criticaron varios grupos, entre ellos el comunista, que este año no se prevea aumentar el empleo asalariado neto del sector público. El ministro, quien tampoco citó las cifras globales de remuneraciones, sí expuso con claridad, a lo largo de su discurso, que el sector público contribuyó a que la economía española no se deprimiera más el pasado año (las Administraciones públicas aumentaron el empleo un 4,6%, frente a la reducción del sector privado) y moderará en 1983 la caída de la demanda (consumo interior y exportaciones), en la que el Gobierno ha puesto las esperanzas de reactivación. Frente a aumentos reales del 6,1% y 14,9% en los gastos públicos de consumo e inversión, durante 1982, respectivamente, los avances esperados para el presente año son del 4,5% y 10%.Esta desaceleración, además de en el estancamiento del empleo, se nota en los gastos de personal, que perderán participación relativa en el conjunto, pese a que puedan parecer elevados. El fenómeno, distorsionado por la creación de empleo, se inició ya desde hace casi un lustro, durante el cual los funcionarios han perdido más poder adquisitivo que el resto de los asalariados, lo que no ocurrirá este año.

Como puede apreciarse en el cuadro adjunto, los mayores incrementos previstos corresponderán al personal no funcionario, como el de instituciones financieras públicas (27,7%), Renfe y empresas del Patrimonio del Estado (26,7%), empresas del Instituto Nacional de Industria (18,9%) y Ente Radiotelevisión Española. Entre tanto, el Estado y la Seguridad Social quedan en una franja media del 14,4%14,2%, alejada del 12,8% de los organismos comerciales, industriales y financieros, y un poco superior al 12,8% de los organismos autónomos.

Salvo en los casos del Estado, Seguridad Social y organismos autónomos comerciales, industriales y financieros, las previsiones para 1983 han sido expresadas en términos de Contabilidad Nacional, con inclusión de las cotizaciones sociales, lo que arroja el coste salarial total.

INI, INH y Renfe

En conjunto, la subida salarial de los funcionarios del Estado supondrá 172.880 millones de pesetas, de ellas, 163.970 para los activos. Ello supone que los gastos para funcionarios activos se elevan un 17,1%, pero la media es recortada por el 4% de subida que tendrán los pasivos.En la Seguridad Social, el incremento presupuestado de retribuciones es de 54.872 millones de pesetas (hasta 441.251 millones), el 14,2%.

Mayor es el impacto absoluto y relativo esperado para las siete decenas de empresas participadas directamente por el Instituto Nacional de Industria, que han previsto pasar de 361.292 a 492.528 millones de pesetas en términos de contabilidad nacional. Este 18,9% de aumento será, no obstante, inferior al 22,2% previsto en la producción de bienes y servicios, que acenderá a 1,62 billones de pesetas. El valor añadido bruto del grupo puede crecer un 29,3%, con una estimación de recursos y empleos que pasarán de 553.173 a 715.060 millones de pesetas.

En el Instituto Nacional de Hidrocarburos, que no ha facilitado datos comparativos con 1982, el 42,4% de sus 57.216 millones para remuneraciones será absorbido por Campsa y otro 26,9% por Enpetrol. En las empresas del tercer holding público, incluida Renfe (que no depende de la Dirección General de Patrimonio del Estado), los datos enviados al Parlamento señalan que el 26,7% de subida en la remuneración de los asalariados coincidirá con un 8,7% de incremento en la producción de bienes y servicios, creciente desde 324.725 a 352.828 millones de pesetas. Pero debe tenerse en cuenta que en Renfe, donde, sí se ha previsto crear empleo neto, la elevación será del 34,21% (desde 101.249 a 135.909 millones de pesetas), mientras que la producción de bienes y servicios destinados a la venta puede descender un 15,2% .(de 115.732 a 98.169 millones. En Mercorsa, el coste laboral crecerá un 81%, en tanto que en Tabacalera sólo se ha previsto el 9,2%. En conjunto, el valor añadido de la treintena de empresas del Patrimonio del Estado descenderá un 17%.

En los 34 organismos autónomos administrativos de la Administración central se observa una aproximación entre el aumento de los recursos y empleos, 15,7% (hasta 178.600 millones), y el de las remuneraciones, 14,5% (hasta 135.600 millones). No ocurre así en los 76 organismos autónomos comerciales, industriales y financieros, cuya producción de bienes y servicios se elevará de 1,58 a 2,19 billones, en tanto las retribuciones subirán un 12,8% (hasta 81.835 millones de pesetas).