Argelia y España tratan de definir un acuerdo transitorio sobre los suministros de gas natural
El ministro español de Industria y Energía, Carlos Solchaga, y el argelino de Energía y Petroquímica, Belkacem Nabi, mantuvieron ayer un segundo encuentro, en el marco de las negociaciones hispano-argelinas sobre el suministro de gas natural a España.
A pesar de que continúan sin resolverse los problemas principales, relativos a cantidades y precios, Solchaga hizo hincapié en la existencia de un clima de mayor distensión, en las conversaciones, ante la perspectiva de definir un acuerdo transitorio que incluiría la revisión de las condiciones de suministro y de precios y el pago, por España, de compensaciones monetarias o de otra naturaleza.En declaraciones a EL PAIS, el ministro español subrayó que dos de los factores que han suavizado la tensión inicial ha sido el gran éxito de la visita oficial a Argelia de los Reyes de España, que ha confirmado las posibilidades de cooperación entre los dos países y la propuesta española ante la Agencia Internacional de Energía sobre la construcción del gasoducto norteafricano, de la que había sido informada Argelia.
La materialización de ese proyecto, respaldado por Estados Unidos y acogido, con cierta frialdad, por Francia, supondría ir hacia un marco de cooperación multilateral hispano-argelina muy importante, tanto en el tendido del gasoducto como en el conjunto de inversiones que girarían en torno al mismo, según Solchaga.
Con relación al contrato de Enagas, objeto de las conversaciones, existiría ahora un mayor margen de flexibilidad argelina que se expresaría en aceptar que España necesita un período de reflexión para reconsiderar todo el tema del gas natural desde una situación que no sea de angustia, con la cláusula de take o pay (tome o pague), es decir que, a tenor con lo que se ha traslucido de las conversaciones mantenidas ayer en Argel, Argelia aceptaría que se retiraran menos cantidades de gas natural de las previstas en el contrato firmado en 1975 (45.000 millones de térmias anuales) a cambio de ciertas compensaciones financieras.
Lo que está tratando de hacer valer el ministro español no es la denuncia del contrato o de la cláusula citada, que pondría en grave peligro el futuro de las relaciones con Argelia, sino llegar a ese acuerdo transitorio, con pago de compensaciones, que fuera de algún modo compatible con la situación económica española, difícil a corto plazo.
Compensaciones financieras
Las posiciones, sin embargo, habrían dejado de ser antagónicas y se han estrechado después de la visita de los Reyes, dentro de consideraciones económicas. La denuncia de la cláusula señalada es una posibilidad que España no considera dentro del ambiente de distensión que predomina en las relaciones con Argelia.Por el contrario, la parte argelina podría hacer una interpretación más flexible de la cláusula, preservando el espíritu de la relación contractual. En este sentido, Solchaga expresó que había presentado ayer contrapropuestas a propósito de las compensaciones financieras, para aproximar puntos de vista. Argelia reclama una cifra, al parecer, superior a los 8.000 millones de pesetas.
Los dos ministros volverán a reunirse en el plazo de un mes, después de que se lleve a cabo un nuevo encuentro a nivel de expertos, previsto para dentro de dos semanas.
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