La azarosa historia de los cursos de inglés
La cuestión, evidentemente, no es nada fácil. Los padres ahorran durante todo el año para poder mandar a los hijos un mes al Reino Unido y resulta que el niño o niña llega después del verano aprendiendo de todo menos el idioma. Bien porque la organización contratada no lo atendió como había prometido, bien por que pasó hambre e incomodida des con la familia asignada o bien -lo más frecuente- por que el pueblo al que le habían llevado estaba lleno de niños españoles como él. Como ayuda de padres desesperados, aquí van algunos consejos.Campamentos juveniles
Conocer primero los tipos de cursos en el mercado. En Estados Unidos se organizan campamentos juveniles en muy buenas condiciones: además de clases de inglés, se practican toda clase de deportes (equitación, natación, atletismo, etcétera). El único inconveniente es su precio, que casi roza las 300.000 pesetas, más o menos, para un mes de estancia. La otra modalidad es la conocida de residencia en familias, incluyendo o no clases, a precios más reducidos (unas 200.000, con variedades según las horas de clases, comidas, etcétera).
En el Reino Unido existen también distintos programas. Los llamados cursos internacionales tienen el inconveniente de que el niño, con casi total seguridad, se encontrará con compañeros provenientes del mismo país, lo que dificultará su aprendizaje. Se puede considerar, sin embargo, la ventaja de la convivencia con niños de otras culturas europeas.
Pedir informes
Dentro del apartado de la residencia familiar habrá que tener un especial cuidado de que en una pequeña localidad no se junten, como ocurre en no pocas ocasiones, más 'niños españoles que habitantes tiene, más el profesorado, que muchas veces es también español. Las consecuencias son las previsibles.
Sin duda, todas las organizaciones dedicadas a estas tareas prometerán a los padres cuidados y garantías de aprendizaje. Sin dudar de su buena voluntad, lo mejor es que los padres pidan nombres de los niños que fueron en años anteriores y se informen así directamente. De todas las maneras, para ayudar a la orientación se puede consultar la guía de Cursos que en España programan intercambios y cursos de idiomas en el extranjero, que elabora y edita el Centro de Información Juvenil de la Dirección General de la Juventud, perteneciente al Ministerio de Cultura. Y aquí una mínima selección de las organizaciones: Afse Becas Internacionales (Madrid, Santa Cruz de Marcenado, 33, 3º, teléfono 48 63 31), especializados en viajes a Estados Unidos; Welcome (Madrid, Rodríguez San Pedro, 2, 12ª, 5, teléfono 446 71 16), cursos en el Reino Unido y Estados Unidos; Anglo Continental Educational (Madrid, Núñez de Balboa, 49, 6ª, teléfono 257 41 66), cara, pero con garantías; Byron College (Madrid, Antonia Mercé, 8, teléfono 431 85 66), buena para el Reino Unido; Intercultural Student Experiences (Madrid, Cardenal Cisneros, 65, 4º B, teléfono 244 47 89), recomendable para Estados Unidos; International House (Barcelona, Trafalgar, 14, teléfono 318 84 29), para el Reino Unido.
Un último consejo: habrá que fijarse muy bien en las condiciones del precio. No todos comprenden las mismas cosas (cursos, seguros, material escolar, etcétera), y algunos además están condicionados a unas subidas de carburantes siempre, imprevisibles. No olvide que no siempre lo más barato sobre el papel es lo más barato en la realidad. Como ejemplo, un precio tipo, en este caso el de Welcome: cuatro semanas en una familia inglesa, comprendiendo vuelo de ida y vuelta, alojamiento, pensión completa, de 15 a 20 clases semanales, seguros, material escolar, y una excursión semanal, puede costar unas 115.000 pesetas.
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