Preocupación en el Senado de EE UU por la implicación de Reagan en Nicaragua
El senador Howard Baker, jefe de la mayoría republicana en el Senado, asegura que esta Cámara se halla profundamente preocupada por las informaciones que hablan de que la Administración Reagan está apoyando activamente las acciones de la guerrilla antisandinista en Nicaragua."Hay una gran preocupación con respecto a esto" dice el senador para describir la reacción del Senado ante las informaciones sobre esta cuestión. Baker se va a reunir en los próximos días con la dirección del Comité de Inteligencia "para escuchar de ellos información confidencial sobre lo que está ocurriendo".
Dos miembros de este comité ya han manifestado al Senado que la implicación norteamericana en el el caso, cubierta o encubierta, viola tanto las leyes nortemericanas como la carta fundacional de la Organización de Estados Americanos (OEA). Precisamente de esto último acaba de acusar Nicaragua a Washington en este foro.
El representante sandinista también asegura que Washington va a imponer sanciones económicas a su país.
La Casa Blanca ordenó el martes que se revisaran las cuotas de importación de azúcar procedente de Centroamérica. Interrogado Larry Speakes, portavoz del presidente Ronald Reagan, sobre si había motivos políticos en la revisión de cuotas, contestó: "Yo no he dicho eso". Sin embargo, tras la declaración oficial de la Casa Blanca, un funcionario de Departamento de Estado confesó que Nicaragua era claramente el objetivo de la medida.
Un grupo de destacados ciudadanos norteamericanos y latinoamericanos -políticos, empresarios, periodistas, banqueros y prelados- ha suscrito un llamamiento para que Estados Unidos, la Unión Soviética y Cuba mantengan un diálogo multilateral con los países centroamericanos para encontrar salidas a la crisis.
