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Se extiende por Cisjordania el envenenamiento masivo mientras siguen ingnorándose sus causas

Mareos, vértigos y náuseas son los síntomas del misterioso mal que aqueja desde el pasado 21 de marzo a jóvenes de los territorios ocupados. El mal estaba limitado al principio a la zona de Yenin, pero después se extendió por Cisjordania y alcanzó las regiones de Nablus, Belén y Hebrón, donde unas 500 personas han sido hospitalizadas en las últimas 24 horas. Las causas del mal permanecen en el misterio desde hace 15 días. Se habla de envenenamiento químico, gas tóxico y psicosis colectiva.Desde el primer día de la epidemia, una docena de jóvenes palestinas se encuentran hospitalizadas en la clínica de Dehbeit-Dajallah, sus rostros están sombríos, crispados y atentos a cualquier noticia que se produzca sobre el caso. La muchedumbre asegura que "nuestros jóvenes han sido envenenados por ellos". Y todos saben que "ellos" equivale a la autoridad israelí.

Sin embargo, hasta este momento, no hay el menor indicio, la más mínima prueba relativa a un posible envenenamiento o utilización de gas tóxico. Ni siquiera los médicos palestinos que atienden a los enfermos afirman algo en tal sentido. Los centenares de exámenes efectuados en los laboratorios israelíes han dado un resultado negativo. Las autoridades de Israel invitaron a un experto de la Cruz Roja Internacional a trasladarse al lugar para examinar directamente la situación. El doctor Francisco Walter, enviado especial de la Cruz Roja, ha abandonado Israel después de tres días de exámenes sin encontrar "rastro de sustancias tóxicas", según Radio Jerusalén.

Para disipar cualquier equívoco, Israel ha solicitado de la Organización Mundial de la Salud (OMS) el envío de expertos y de dos médicos norteamericanos. Los investigadores de Atlanta, miembros del Centro Internacional de Epidemiología, considerado el de mayor prestigio del mundo, llegaron a Cisjordania para estudiar el misterioso mal. Los servicios sanitarios israelíes aseguran que se trata de un caso de "psicosis o histeria colectiva", que afecta a especialmente a las jóvenes adolescentes. Las causas de tal psicosis sería un pánico de origen desconocido.

Elementos hostiles

Las autoridades militares israelíes, en Cisjordania, sospechan que "elementos hostiles a Israel" han provocado este pánico mediante rumores, en una campaña sistemática de envenenamiento en las escuelas de jóvenes de las localidades palestinas.

Dos jóvenes palestinos han sido detenidos en Nablus, por circular en un coche exhortando a la población, mediante un altavoz, para que no bebiera el agua de la ciudad, porque estaba envenenada.

Además un cámara y un técnico de sonido de la cadena de televisión norteamericana CBS fueron detenidos el pasado lunes, también en Nablus, acusados de "haber filmado el estado de desvanecimiento de las jóvenes" en el hospital de la ciudad. "Hemos filmado lo que hemos visto", manifestó el jefe de la oficina de la CBS en Israel, Warren Lewis. "Nuestro deseo", prosiguió, "era filmar lo que pasaba y obtuvimos la autorización de rodar en el interior del hospital gubernamental de Nablus del propio director del centro".

Esta última detención, ordenada por el general Ori Orr, comandante de la región, refleja el creciente nerviosismo de las autoridades israelíes enfrentadas no sólo al misterioso mal, sino además a las acusaciones que se expanden por Cisjordania y que son ampliadas en el mundo árabe.

Incluso la Prensa egipcia, a través del diario Al Ahram, acusa veladamente a las autoridades israelíes de envenenar a los jóvenes palestinos para separarles de sus tierras.

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