Nace un niño de una mujer joven clínicamente muerta
Una mujer embarazada que había sido declarada clínicamente muerta el pasado 24 de enero ha dado a luz un niño, mediante cesarea, en el hospital de la universidad de California, en San Francisco (Estados Unidos). El niño pesó menos de kilo y medio y en la operación intervino un equipo de cien médicos, profesores y técnicos, quienes declararon ayer que este parto "demuestra que el cuerpo de la madre puede ser apoyado artificialmente sin límite para salvar al feto".La madre, de unos 25 años, cuya identidad no ha sido revelada por deseo de la familia, estaba embarazada de 22 semanas cuando, el pasado 24 de enero sufrió una lesión masiva en el sistema nervioso central, al parecer causado por un quiste cerebral. Los médicos la declararon "clínica y legalmente muerta", pero sus familiares pidieron que se mantuvieran sus sistemas de apoyo vitales para no perder al niño.
Los médicos del hospital californiano decidieron adelantar el parto y practicar a la madre una cesárea debido a que el feto parecía no crecer en las últimas semanas y temieron por su vida. A los 25 minutos del nacimiento, de acuerdo con los familiares, desconectaron los sistemas que mantenían viva a la madre.
El doctor Robert Creasy, profesor de obstetricia en el centro médico de la universidad de California, admitió tras el parto que no era optimista sobre las posibilidades de supervivencia del niño, ya que "la tragedia de la madre ocurrió sólo a las 22 semanas de embarazo". Creasy dijo que tanto el padre como los abuelos "expresaron gran felicidad por el nacimiento de la criatura, que permanecerá largo tiempo en el hospital universitario".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.