La Policía sospecha que tras el fraude de los cosméticos hay una organización internacional

Manuel Rodal, fundador y apoderado de Life Specials SA, está siendo buscado por la Policía en relación con el presunto delito de estafa cometido por esa empresa de cosméticos y perfumería. Rodal se encuentra en paradero desconocido desde el pasado 21 de marzo, fecha en que fueron detenidos en distintas ciudades españolas su socio Manuel Paz y otros veinte ejecutivos de la firma. La Policía sospecha que detrás de la venta piramidal de cosméticos existe una organización Internacional.

Life Specials fue fundada en Madrid el 29 de diciembre de 1980 por Manuel Rodal y Manuel Paz. Su domicilio social se estableció en el número 88 de la Gran Vía y fueron abiertas delegaciones en Barcelona, Sevilla, Valencia, Gijón y Vigo. En la licencia fiscal de la firma se especificaba que su actividad era la fabricación y venta de artículos de perfumería, cosmética y limpieza, pero Life Specials nunca llegó a producir sus mercancías, ya que las compraba, a precios muy bajos, a un laboratorio madrileño.En medios policiales se tiene el convencimiento de que detrás de Life Specials existe una organización multinacional dedicada al fraude. Una caso similar se produjo en España, en los primeros años setenta, con la empresa Holiday Magic, también dedicada a la venta de cosméticos. Sus directivos, nunca detenidos, se encontraban en Estados Unidos.

La empresa colocaba agresivos anuncios en los diarios, ofreciendo beneficios mensuales entre las 60.000 y las 560.000, pesetas. "Usted necesita ganar dinero y aquí tiene la oportunidad de hacerlo, así qué no perdamos más tiempo y empecemos ya", decía un folleto. A estas personas se les vendía asimismo por trescientas pesetas un libro escri to por el doctor Napoleon Hill y titulado Piense y hágase rico. La empresa le organizó, desde el primer momento, en cinco niveles de participación, el más alto de los cuales era el de ejecutivo y el más bajo el de presentadora. Para acceder a este ultimo había que entregar 4.000 pesetas, a cambio de las cuáles se recibía un lote de productos cuyo valor real no superaba las doscientas pesetas. Estos artículos eran prácticamente invendibles por su mala calidad y elevados precios, por lo que la única forma de rescatar el dinero entregado y llegar a obtener beneficios era acceder a la siguiente categoría, la de distribuidor. Esta se alcanzaba pagando 30.000 pesetas y daba derecho a formar un grupo de presentadoras, de cuyas pagos iniciales se tenía una participación. El siguiente nivel era el de coordinador y se ascendía a él aportando 150.0 00 pesetas. Los beneficios eran asimismo más elevados. Y así sucesivamente. En el momento de ser desarticulada, participaban en la pirámide 7.991 personas, la mayoría mujeres, de seis ciudades españolas, con un desembolso total de 467.868.000 pesetas. En cuanto a los beneficios de Rodal y Paz, cabezas de la pirámide, pueden haber ascendido, en los dos últimos años, a una cantidad situada entre el 10% y el 20% de la cifra total desembolsada, según la Policía.