El supuesto intento de golpe de Estado en Grecia coincide con la jubilación de altos militares
Transcurridos tres días de incertidumbre sobre posibles movimientos militares golpistas promonárquicos, la opinión pública griega se da por convencida de que la intentona no revistió dimensiones importantes y de que la jubilación de catorce altos cargos militares obedeció a un plan previsto de antemano, informa desde Belgrado Juan F. Elorriaga.
Es de público conocimiento que los aparatos del mayoritario Movimiento Socialista Panhelénico en el poder (PASOK) y del Partido Comunista Griego (KKE), que cuenta con un 11 % de sufragios, se movilizaron en puntos de todo el país durante el fin de semana. Mientras que fuerzas del Ejército y la policía llevaban a cabo en el Atica, la región de Atenas, maniobras descritas oficialmente como de rutina periódica, en Salónica, mayor ciudad del norte macedonio, hubo manifestaciones a los gritos de "¡Viva la democracia!", "¡Fascismo, no!", "¡Abajo los golpistas!", "¡Fuera la OTAN y Estados Unidos!".El portavoz oficial del Gobierno socialista desvinculaba ayer esas manifestaciones de toda intención oficial y las atribuía a "esa sensibilidad democrática del pueblo".
La prensa de Atenas solicita una explicación oficial detallada, desde la derecha civilizada -derrotada hace año y medio en las urnas por el PASOK- hasta los comunistas. Los primeros se preguntan a través de su líder, Evangelos Averof, por la razón de que, si no hubo golpe en ciernes, socialistas y comunistas se movilizaran aunadamente. "Una movilización de ese tipo perturba la democracia y prepara el camino hacia el Estado de partido único", declaró Averof. Los comunistas piden aclaraciones y "medidas sustanciales para erradicar todo obstáculo en la vía de la democratización de nuestras Fuerzas Armadas".
Aseguran en Atenas que el presidente de la República, Constantino Caramanlis, conservador histórico investido de fuertes poderes por la Constitución y persona de alto crédito en el ejército, no interrumpió su partida dominical de golf en el club de Glifada.
A los periodistas que le pidieron que comentara los rumores les respondió: "Estupideces, sin duda". El socialista Andreas Papandreu, primer ministro y ministro de Defensa, cenaba por su parte con el embajador estadounidense, aparentemente más preocupado por el tenso diálogo sobre el futuro de las cuatro bases norteamericanas en suelo heleno que por una amenaza golpista.
No obstante, las declaraciones "extremamente categóricas" del subsecretario de Defensa, Antonis Drosoyanis, de que "el pasado fin de semana no existió un plan de golpe de Estado", el diario pro gubernamental Ethnos daba la noticia del arresto de militares al norte del país, y el sensacionalista Elefterotipia, de insubordinación de unidades en torno al río Evros, fronterizo con Turquía.
Retiro de generales
A falta de más información oficial, se da por seguro que la estabilidad del tandem Caramanlis-Papandreu, binomio de tolerancia con la evolución y cambio sin revolución, sigue marchando a lo largo de un camino en el que todavía hay nostálgicos de esos coroneles que siguen purgando su dictadura (1966-1974) en la prisión de Koridalos, antes ocupada por quienes hoy están en el poder o en el parlamento.Por su parte, el Gobierno griego anunció ayer que el retiro de seis tenientes generales obedece a un plan previo de la Administración sobre ascensos y retiros en las Fuerzas Armadas, que anualmente llevan a cabo las autoridades.
Entre los altos mandos militares que han pasado al retiro se encuentran los jefes de tres regiones militares y el encargado de los servicios jurídicos de las Fuerzas Armadas.
Los militares que han pasado a la situación de retiro han sido sustituidos por generales de división nombrados por el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, que prteside el general Theodoros Deyannis.
El anuncio de estos ceses concidió con los rumores de una intentona golpista.
Sin embargo, un portavoz del Gobierno griego declaró que los rumores sobre un supuesto golpe de Estado surgieron como consecuencia de unas maniobras militares que llevó a cabo la policía y ,fuerzas mIlitares estacionadas en los alrededores de la capital helena. De todas formas, los relevos entre los altos mandos militares ha originado una ola de rumores en la Prensa griega, de tal forma que algunos periódicos se refieren clarmanemte a que se está desarrollando una. "purga" entre los mandos del Ejército heleno.
