Beguin incluye a Sharon en la importante comisión de Defensa
La decisión del primer ministro de Israel, Menájem Beguin, de incluir al ministro sin cartera, Ariel Sharon, en dos importantes comisiones ministeriales -la de Defensa y la encargada de seguir las negociaciones con Líbano-, ha provocado una viva indignación en la oposición y en la opinión pública hebrea. La medida ha causado un evidente descontento en el seno del Gobierno, aunque la "autoridad de hierro de Beguin" ha limitado su manifestación.Ha sido el ministro de Comunicaciones y general en la reserva, Mordejai Tzipóni, el único en opo nerse a Beguin, y cuestionó la cor dura de tal decisión. Tzipori votó en contra de la inclusión de Sharon en las mencionadas comisiones, y otros tres ministros se abstuvieron. Beguin se mostró "muy irritado" por la intervención del ministro de Comunicaciones.
Haim Bar-Lev, secretario general del Partido Laborista, consideró que la decisión de Beguin era ofensiva para la comisión Kahane, que investigó las matanzas de Beirut y recomendó la destitución del entonces ministro de Defensa, Ariel Sharon. El diputado laborista Yosi Sarid fue más duro y calificó la medida gubernamental como "una sonora bofetada" contra la referida comisión oficial.
Por otro lado, el partido centrista Shinuy considera que el nuevo nombramiento de Sharon puede permitirle "influenciar negativamente la política israelí relativa a defensa y asuntos internacionales". Un portavoz del movimiento Paz Ahora ha declarado, por su parte, que la decisión de¡ Gobierno Beguin constituye "un desprecio para la comisión investigadora".
La Prensa hebrea no es menos severa. "Arrojado por la puerta, Sharon vuelve por la ventana", títula el periódico laborista Davar. Para el diario independiente y liberal Haaretz, la rehabilitación que Beguin ha hecho de Sharon "supone un premio a la mala conducta" y "es una hipocresía que clama al cielo".
Propuesta por sorpresa
Los observadores políticos señalan que Beguin lanzó la propuesta relativa a Sharon por sorpresa y sin consultar al consejero jurídico del Gobierno. Ni siquiera puso al corriente de sus intenciones a Moshe Arens, futuro ministro de Defensa, que sustituye a Sharon.Desde el punto de vista legalista y formal, Beguin tenía derecho a actuar como lo hizo, según el antiguo ministro de Justicia laborista Haim Tzadok, pero, entrenado en el fonco de la cuestión, su decisión "viola el espíritu de las recomendaciones de la conmisión Kahane".
Fuentes bien informadas próximas al primer ministro afirman que la decisión de incluir a Sharon en dichas comisiones, que se reúnen sólo en raras ocasiones, no conceden a Sharon "ningún poder real" y permitirán "neutralizar su capacidad de hacer daño".
Sin embargo, en los medios cercanos al viceprimer ministro, David Levy, consideran que Ariel Sharon no es un hombre que se contente con cargos honoríficos, y que muy pronto relanzará su lucha por conquistar el poder en el seno del Gobierno y de la coalición Likud.
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