Andropov retrasa hasta el lunes su encuentro con Claude Cheysson
La primera fase -como él mismo la calificó- de la visita que realiza a la URSS el ministro de Asuntos Exteriores francés, Claude Cheysson, ha servido, simplemente, para exponer cara a cara las diferentes posiciones de las diplomacias de París y Moscú. "Estoy convencido de que puede haber un diálogo" afirmó ayer tarde Cheysson. Pero este viaje sólo ha servido, al parecer, para repetir y matizar argumentos, sin que se llegaran a limar del todo las aristas.
Los euromisiles, armas temibles
Primer viaje de alto nivel de un representante del Gobierno de Mitterrand, la visita de Cheysson ha podido romper algo el hielo. Con una conferencia de Prensa, Cheysson dio ayer fin a la primera parte de su estancia en Moscú. Hoy visitará Leningrado -como turista destacado- y el lunes por la mañana se reunirá con el secretario general del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS), Yuri Andropov, a quien entregará el mensaje personal del presidente galo, François Mitterrand.El hecho de que Andropov reciba a Cheysson el próximo lunes -en lugar de haberlo hecho ayer, aprovechando un hueco del programa del ministro francés- parece obedecer a un simple pique diplomático. Anunciando a su llegada que portaba un mensaje de Mitterrand para Andropov, habría obligado a éste a recibirlo, pero los soviéticos -según se afirmaba ayer en círculos diplomáticos occidentales de Moscú- prefirieron aplazar el encuentro hasta el lunes, para penalizar así, diplomáticamente, la precipitación de Cheysson. Tampoco han faltado rumores que aseguraban que Andropov se encontraba indispuesto, cosa que no parece ser cierta, ya que el jueves asistió a la reunión ordinaria del Politburó. En su conferencia de Prensa de ayer tarde, Claude Cheysson dedicó gran atención a exponer los puntos de vista de su país sobre el desarme en Europa. Otras cuestiones candentes -como Afganistán o Polonia- han sido, al parecer, tocadas sólo de forma muy general durante las ocho horas y media que, en total, han ocupado sus diálogos con su colega soviético, Andrei Gromiko. Cheysson repitió de nuevo que "la fuerza nuclear francesa está destinada tan sólo a proteger el territorio francés". Es, agregó, una fuerza independiente "que nunca pondremos a disposición de nuestros aliados". "Hay que mantener el equilibrio nuclear", insistió, ya que es "una garantía de paz. Los SS-20 soviéticos", añadió, "rompen el equilibrio, ya que apuntan hacia países que no tienen medios propios de respuesta y que dependerían, en última instancia, del apoyo que les diera Estados Unidos con sus armas estratégicas".
El jefe de la diplomacia gala mostró también su confianza de que se llegue a un acuerdo sobre armas de alcance medio en Ginebra, ya que el fracaso de estas conversaciones conduciría a la instalación "de armas temibles", los euromisiles, "en esos países que hoy están sin defensas".Por lo demás, el viaje del ministro francés ha dado lugar a discusiones de tipo económico y comercial. París estaba un tanto alarmado por el creciente déficit comercial que viene arrastrando estos últimos años frente a la Unión Soviética. Cheysson parecía plenamente satisfecho de su gestión. Igualmente, anunció que Francia comprará 8.000 millones de metros cúbicos más de gas soviético -por encima de la cifra prevista- y aprovechó la circunstancia para atacar la postura norteamericana respecto al gasoducto siberiano-europeo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.