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'Autogolpe' de la Junta Militar argentina contra el presidente

En lo que se considera como un autogolpe, la Junta Militar argentina dará hoy precisas instrucciones al presidente de la nación, general Reynaldo Bignone, para que modifique las líneas políticas y económicas de su Gobierno, reclamando incluso el relevo de funcionarios de su Gabinete, aunque no en el primer nivel.

La crisis, considerada la más grave desde la derrota militar en la guerra de las islas Malvinas, se abrió el jueves pasado cuando, después de una imprevista reunión de ocho horas de duración, la Junta Militar advirtió en un comunicado su decisión de "clausurar publicaciones, secuestrar ediciones e incluso detener a los responsables de lo que se considera una campaña de desprestigio de las Fuerzas Armadas y de desestabilización del Gobierno de transición".Al día siguiente, se decretó el secuestro de la revista Quorum, que denunciaba nuevos casos de desaparecidos, en los que se encontraría implicado el vicealmirante Chamorro, ex director de la Escuela de Mecánica de la Armada. Y también se conoció la clausura de dos salas teatrales por ofrecer espectáculos considerados inmorales. En uno de ellos, se representaba la versión teatral de Doña Flor y sus dos maridos, la conocida novela del escritor brasileño Jorge Amado.

La enérgica amenaza alcanzó también a las declaraciones de los dirigentes políticos. El doctor Víctor Martínez, precandidato a la Vicepresidencia de la República como compañero de fórmula del dirigente Raúl Alfonsín por el Movimiento de Renovación y Cambio del radicalismo, fue intimado por telegrama para que ratifique o rectifique sus manifestaciones públicas en el sentido de que "los militares se habían quedado a rapiñar en el poder".

El endurecimiento de los tres comandantes de las Fuerzas Armadas es el reflejo de la repercusión que tuvo la interminable serie de denuncias contra la gestión de los militares en la guerra y en la conducción económica y política nacional e internacional.

La nueva ronda del próximo diálogo político deberá ajustarse, según la Junta Militar, a un cronograma prefijado que señala como fecha de elecciones el domingo 30 de octubre para que la entrega del poder se realice entre enero y febrero del año próximo, contra el deseo de los dirigentes políticos que insisten en que el traspaso del poder debe efectuarse antes de que finalice este año.

La intención de los militares es resolver primero, sin intervención del nuevo Gobierno civil electo, los pases a retiros y nuevos ascensos dentro de las tres ejércitos.

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A la presión ejercida por la Junta contra el presidente se sumó ayer un duro documento de claro tono golpista, producido por el Centro de Oficiales de las Fuerzas Armadas, que agrupa a los altos mandos en condición de retiro efectivo.

Documento de los 'duros'

El comunicado, firmado por el titular del centro, general Toranzo Montero, y todos los miembros de la comisión directiva, señala que "se aprecia que el Gobierno ha perdido el control de la situación dejando por ello de estar en condiciones de continuar con el manejo de la cosa pública" y propone como medida inmediata "la modificación sustancial y violenta de la conducción política para asegurar la subsistencia de la República y de sus Fuerzas Armadas", mientras deja constancia de que "la falta de reversión del proceso permitirá la subsistencia del régimen peronista, populista y marxista que aún se encuentra instaurado e intacto en la nación por la falta de una adecuada justicia militar revolucionaria".La Junta Militar analizará también hoy la declaración con la que fijará la posición de las Fuerzas Armadas en torno a los casos de detenidos desaparecidos. El documento, que se viene preparando desde hace tiempo, podría hacerse público antes de fin de mes después de sufrir una nueva modificación. Se han eliminado los anexos que contenían una lista de las víctimas del terrorismo y también los nombres de unos 2.000 desaparecidos. El criterio de la Junta sería el de dar a conocer el cuerpo central del texto y suministrar el resto de la información a quienes la requieran en una dependencia oficial abierta a tal efecto. Por su parte, el presidente, general Reynaldo Bignone, desmintió las versiones que circularon el fin de semana en el sentido de que habría presentado su renuncia y aseguró que "no hay tal colisión de poderes".

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