Una jornada que supo a poco

El comienzo del último mes del año en las Bolsas españolas ha sido un tanto deslucido, a pesar de que no se esperaba nada brillante. Se aguardaba con cierta expectación, aunque no demasiada, el discurso de la presentación del programa de Gobierno por parte del futuro presidente. No hubo desilusiones, tal vez porque no había ilusiones, pero supo a poco.La falta de puntualizaciones sobre temas económicos ha sido el comentario del día en el parqué, y se ha visto acompañado por la noticia de que la política de rentas del PSOE exigirá una limitación de dividendos en las empresas con beneficios. Como quiera que la medida afectará sobre todo a bancos, eléctricas y empresas de servicios en régimen de monopolio, ha tenido una cierta repercusión sobre los ánimos de los inversores.

La sesión discurrió en medio de este ambiente, y así, las eléctricas tuvieron una actuación bastante más floja que la del día anterior. Ayer comenzaron las ampliaciones de capital de Hidrola y Sevillana a unos precios muy bajos, tanto que la venta de cupones a estos precios no ofrece ningún aliciente y va a ser difícil que tanto particulares como instituciones saquen cupones a la venta, como no sea para evitar pagos posteriores.

En este ambiente, el sector eléctrico perdió 86 centésimas, algo más de lo que consiguió ganar el día anterior.

El sector bancario sigue muy contenido a pesar de que ayer los resultados fuesen algo más flojos que en la sesión anterior. El saldo de las operaciones por caja de los siete grandes bancos apenas ofrecía diferencias con la cifra que tenía en la sesión del martes. De los algo más de 170.000 títulos a la venta, más de la mitad, 100.000, le correspondían al Banesto; el resto presentaba unos saldos que iban desde los casi 2.000 del Bilbao hasta los 23.000 y pico del Hispano. No alteraron sus cambios Bilbao, Banesto y Santander; sufría un recorte de tres puntos el Popular; de dos, Hispano y Vizcaya, y tan sólo el Central tuvo un cambio positivo, ganando cuatro enteros al tomar el 100% de su diferencia.

Del resto de los sectores del mercado, el único que continúa manteniendo algún tipo de resistencia es el de constructoras, cementos e inmobiliarias, pero sólo en alguno de sus valores más punteros.

En la Bolsa de Barcelona, este mismo grupo, que el martes se mostró con bastante fuerza, ayer cedió, y sólo Asland y Focsa mantenían sus posiciones. Los demás grupos del mercado tuvieron, como en días pasados, actuaciones similares en casi todo el mercado madrileño, incluyendo al sector de monopolios, que si el martes frenó la subida de los índices generales, ayer amortiguó su caída al repetir cambio Telefónica en Barcelona y ganar un entero en Madrid.

Para la sesión de hoy no se esperan cambios en los mercados de valores, y es de esperar que sigan sucediéndose esas pequeñas oscilaciones de los indicadores generales hasta que se defina alguna tendencia. El que ésta sea positiva o negativa dependerá en gran medida de la aceptación o rechazo de las contestaciones que dé el futuro presidente del Gobierno a las preguntas que los portavoces de la oposición le plantearon ayer.

El programa socialista es ya bastante conocido, y lo único que se espera son fechas para su aplicación y el orden de prioridad a las medidas; a tomar. Estos son los únicos hechos concretos que quedan por conocer.