A partir de enero se podrán consultar los fondos del Archivo Nacional de Cataluña

El Archivo Nacional de Cataluña, creado por la Generalitat a principios del presente año y dependiente de la Dirección General del Patrimonio Artístico, se abrirá al público a partir del próximo mes de enero. Inicialmente, y debido a que las obras se prolongarán unos dos años, el acceso estará restringido a una pequeña área del edificio. El Archivo Nacional de Cataluña albergará la documentación de la Generalitat, la procedente de donaciones de personalidades e instituciones catalanas.

Las dependencias del Archivo Nacional ocupan el edificio que desde 1939 albergó a los diarios Solidaridad Nacional y La Prensa Este inmueble, en la confluencia de la calles Villarroel y Consell de Cent, es propiedad del Arzobispado de Barcelona. Fue construido en los primeros años de la II República y estaba destinado a escuelas de orientación católica.El estallido de la guerra civil impidió su puesta en funcionamiento. El local fue incautado por la CNT en los primeros días de la guerra y convertido en la sede de Solidaridad Obrera. Con la entrada de las tropas franquistas en Barcelonas el edificio pasó a manos de la Falange, convirtiéndose en la redacción y talleres de los dos rotativos citados. Las autoridades franquistas regularizaron la situación y establecieron un contrato de alquiler con los representantes del Arzobispado. La titularidad de este contrato es lo que la Administración del Estado traspasó a la Generalitat, que tiene asegurado el uso del edificio para un mínimo de cincuenta años.

La función del Archivo Nacional de Cataluña es equiparable, salvando las distancias en volumen e importancia, al Archivo Nacional con sede en Madrid. El fondo del Archivo de Cataluña lo constituirán la documentación, tanto histórica como la que genere su acción de gobierno, de la Generalitat de Cataluña- documentación de entidades con peso específico en Cataluña -fábricas como La Maquinista Terrestre y Marítima y La España Industrial- y documentación procedente de archivos de personalidades de la vida política y cultural catalana.

Además, existen negociaciones con el Ministerio de Cultura para que se incluyan en su fondo la documentación de los servicios de la Administración del Estado en Cataluña, que debería ir a parar al archivo provincial, inexistente en la actualidad en Barcelona. Esta documentación -sólo la procedente de la Delegación de Hacienda ocupa medio kilómetro de archivos- va a parar actualmente al Archivo de la Corona de Aragón, y debido a la falta de espacio, es depositado en el archivo de la antigua Universidad de Cervera.

La tarea de recopilación de los archivos de la Generalitat no es fácil. El ex presidente de la Generalitat provisional, Josep Tarradellas, depositó sus archivos personales en el Monasterio de Poblet. Sin embargo, no se sabe con certeza donde están depositados los archivos de la Generalitat republicana.