El general Kenan Evren anuncia la celebración de elecciones en Turquía dentro de un año

El general Kenan Evren tomó ayer oficialmente posesión de su cargo como presidente de la República de Turquía, tras su triunfo en el referéndum popular del pasado domingo. En un discurso televisado al país, el líder del golpe militar de 1980 prometió la celebración de elecciones legislativas dentro de un año y aseguró que de este modo nadie, ni dentro ni fuera de Turquía, "podrá dudar de la determinación de este país de retornar a un sistema democrático".

Evren, de 64 años, se convierte así en el séptimo presidente de la República fundada en 1923 por Mustafá Kemal Atatürk sobre las ruinas del imperio otomano. Con Evren, son seis los jefes del Estado turco de origen militar. El único presidente civil, Celal Bayar, fue derrocado en el golpe de Estado de 1960.El general Evren es además el único presidente turco elegido por votación popular, aunque las condiciones en que se celebró el plebiscito del pasado domingo dejan serias dudas sobre la legitimidad del refrendo popular que pretende haber conseguido el régimen militar. Los electores votaron la nueva Constitución, redactada según los deseos y las necesidades de la junta que ha goberando el país desde el 11 de septiembre de 1980. Pero una de las disposiciones transitorias incluía el nombramiento de Evren como presidente de la República con un mandato de siete años, lo que le permitirá supervisar dos elecciones legislativas.

La ceremonia de toma de posesión, celebrada ayer en el edificio de la Gran Asamblea Nacional (Parlamento) de Ankara, fue sencilla y breve. No podía ser de otro modo, pues el general Evren tomaba posesión de un cargo que ya ocupaba de hecho desde el 16 de septiembre de 1980 y ya había jurado entonces como presidente de la República. Hubo una novedad, sin embargo: Evren vestía, por primera vez, un frac.

Madurez política

En su discurso al país, Evren agradeció el "alto nivel,de madurez política" mostrado por los electores, que aprobaron el texto constitucional y, por consiguiente, su nombramiento como jefe del Estado, con un margen del 91,5% de los votos, lo que para el general-presidente "prueba la concordancia de puntos de vista de todo un pueblo".Se refirió también el general Evren a uno de los temas que más ha preocupado al régimen militar por él presidido y que ha sido una de las causas que le ha obligado a crear desde arriba esta particular democracia tutelada: las críticas de los Gobiernos democráticos occidentales. "Confío en que esos países europeos que se han injerido en nuestros asuntos internos abandonarán ahora su actitud negativa y considerarán con respeto la decisión de la nación", dijo Evren.

El discurso del nuevo presidente turco incluyó una llamada a la oposición política para que se una a "todos aquellos que han decidido respetar la Constitución". Ello permitiría, según Evren, "promover la unidad nacional, la solidaridad y la justicia en el respeto a los derechos del hombre y la herencia nacionalista de Atatürk".

Un centenar de líderes de los partidos políticos tradicionales turcos no podrán participar, durante los próximos diez años, en la democracia engalonada creada por el régimen militar. Se trata de una prohibición expresa, y de acuerdo con fuentes bien informadas de Ankara, el propio general Evren supervisó y aprobó todos y cada uno de los nombres de las personas a las que se impedirá durante una década tomar parte en la vida política del país.

Diplomáticos Occidentales comentaban esta semana en Ankara que la inseguridad y desconfianza del régimen militar hacia los usos democráticos le ha causado un grave perjuicio. Según estimaban estas fuentes, un referéndum limpio, sin que se hubiera prohibido hacer propaganda del voto negativo, sin que las papeletas para el sí y el no hubieran tenido colores distintos y sin que hubiera habido que votar a la vez forzosamente la Constitución y el nuevo presidente, habría sido ganado, hoy por hoy, por el régimen militar, sólo que con porcentajes menos disparatados y, por ello, más verosímiles.

Evren, un artillero diplomado de Estado Mayor y con experiencia de combate en la guerra de Corea, sabe conectar con la gente y se ha convertido sin duda en un personaje muy popular en Turquía. En sus discursos por pueblos y ciudades, el general emplea un estilo paternalista muy del gusto de su audiencia, y observadores imparciales coinciden en reconocerle un cierto carisma. "Por ello mismo podría haber permitido a otros aspirantes disputarle la presidencia de la República, en vez de presentarse como único candidato", comentaba una de las fuentes citadas.

El pasado miércoles, a las 9,05 de la mañana sonaron las sirenas y las bocinas a lo largo y lo ancho de Turquía, y todo -automóviles, personas, actividades- se paralizó durante un minuto. Era el acostumbrado homenaje anual a Mustafá Kemal Atatürk, el padre de los turcos, en el 44º aniversario de su muerte.

Kenan Evren, que recibió su despacho de teniente el mismo año en que murió el fundador de la República, se considera seguidor a ultranza de los principios kemalistas, en cuyo nombre dio el golpe de Estado y ordenó redactar la nueva Constitución.

Ayer, antes de tomar formalmente posesión del cargo, el general Evren visitó el mausoleo de Atatürk.