_
_
_
_

Angel Marrero

es el encargado de coordinar un nuevo y cunoso servicio médico-turístico que ya está funcionando en Cuba. "Tuéstese al sol del Caribe, baile la guaracha y sumérjase en las azules playas del Caribe, pero confíe también en el bisturí de los cirujanos de la isla" podría ser el lema publicitario lanzado por los organismos rectores del turismo cubano para que el turista visite Cuba. Incluso se ha editado un folleto explicativo con los precios incluidos de hasta 73 operaciones quirúrgicas. En él se ofrece, por ejemplo, una ritidectomía (quitar las arrugas de la cara) por mil dólares más hospitalización o eliminar el exceso de grasa del abdomen por cuatrocientos dólares, más 350 por los cinco días de cuidados en clínica. Se ofrece también un limpio sistema de operación de varices, una operación para alargar o acortar las piernas, el aborto (para las cubanas es libre y gratuito) o la colocación de dispositivos intrauterinos. A la turista que lo desee, la colocación del diu le costará cien dólares. En todas las ofertas, el turista contará, para mitigar los males de la incómoda convalecencia, con la posibilidad de tener televisor en color y vídeo, si lo desea, además de menú a elección y, si el estado del paciente-turista lo permite, una visita al cabaret Tropicana y tomar un daiquiri en la misma barra del Floridita, que frecuentaba Ernest Hemingway.

"Nosotros podemos ofrecer un alto grado de capacitación profesional, un evidente rigor científico y una honestidad demostrada", afirma el doctor Angel Marrero. "Nunca vamos a anunciar tratamientos espectaculares, sino que nos basamos en nuestra propia experiencia tras el triunfo de la revolución: tenemos un índice de mortalidad infantil de sólo 18 por mil y las expectativas de vida en la isla se fijan ahora en 73 años para la mujer y de 71 para los hombres". Las cifras las avala la Organización Mundial de la Salud, pero más importante todavía para los fines turísticos que ahora busca el Gobierno cubano son los precios. La socialización de la medicina en Cuba permite ofrecer las intervenciones a precios muy competitivos con otros países cercanos, donde la medicina privada es la única salida posible.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_