Armas prestadas

Militarmente, esto es el huevo, de, Colón: las fuerzas armadas noruegas van a proteger sus aeropuertos con un sistema de armas prestadas. Los norteamericanos pondrán a disposición de sus colegas noruegos de la OTAN las baterías de defensa aérea Hawk, sin que por ello dejen de ser sus dueños. Sin embargo, serán los noruegos los que las utilicen. La idea de esta división político-militar del trabajo dentro de la Alianza proviene del antiguo ministro de Defensa norteamericano Robert Komer. Familiarizado con todos los problemas de la OTAN, Komer siempre buscó soluciones prácticas que permitieran reducir los costes de la seguridad colectiva, al tiempo que ésta se hace más eficiente. El ejemplo noruego demuestra que las ideas de Komer -en un principio, de forma parcial- son realizables. Una gran nación industrial proporciona las armas, que de otra manera estarían almacenadas en depósitos, y un pequeño aliado facilita la dotación humana. Al final de una evolución en este sentido, caso de que la idea haga escuela, podría surgir una revolucionaria decisión de la OTAN: la disolución de las estructuras de las fuerzas armadas de viejo tipo. ¿Para qué mantienen, en realidad, todos los países de la OTAN un ejército propio, una aviación nacional y una marina independiente? También en estos campos serían posibles las concentraciones a base de renuncias e intercambios. 3 de agosto