_
_
_
_

El pueblo de Quero, reducto del franquismo hasta para elegir reina de las fiestas

La preparación de las fiestas de Quero con motivo de su patrona, la Virgen de las Nieves, ha sido el detonante de una situación singular en esta población, situada en el límite de la provincia de Toledo, a muy pocos kiolómetros de Alcázar de San Juan y con una población de 1.800 habitantes, duplicada en esta época por la afluencia de quereños residentes fuera de la villa.

La situación singular se incrementa con una amplia serie de actuaciones de algunos miembros de su Ayuntamiento, convirtiendo en real la frase que han hecho célebre referente a esta población, y que no se ocultan en proclamar reiteradamente: "Quero es el último reducto infranqueable del franquismo", a lo que coadyuva la típica iconografía ultra que prolifera en toda la población, principalmente en el puente del ferrocarril, que da paso al pueblo, en donde las pintadas embadurnan por completo los pilares. Allí se puede leer: "Entras en zona nacional", "Rojos H.P", "Tejero, libertad"... y multitud de anagramas de F.N. También la toponimia de las calles y plazas -plaza Nacional, del Ayuntamiento, General Mola, Generalísimo Franco, General Sanjurjo, Moscardó, Primo de Rivera, calle de la Victoria, etcétera- configura el callejero de Quero.El concejal presidente de la Comisión de Festejos, Santiago Ruiz Cárceles, un tendero acomodado y propietario de grandes fincas en el término municipal, destacado fuerzanovista de la zona, se propuso dirigir la elección de damas de honor y reina de las fiestas 1982 renovando la fórmula habitual, a causa, según parece, de haber resultado elegidas por votación en años anteriores dos reinas de izquierda.

En la presente ocasión, en la primera elección celebrada en el baile público resultaron dos finalistas: Julia Miguel Castellanos, de 15 años, y Mercedes Fernández García, de 14, hija del concejal Mariano Fernández, que pertenece al propio grupo y partido político de Ruiz Cárceles. El concejal de festejos decidió nombrar reina a esta última, para lo que utilizó una estratagema infalible a sus intereses, puesto que el método habitual no daba los resultados apetecidos.

Nombró una comisión formada por jóvenes de determinadas familias de entre sus amistades y partido político, reuniéndolos en su domicilio para proceder a la elección de la reina. Pero la votación arrojó un resultado contrario a los deseos del concejal de festejos: cinco votos a favor de Julia Miguel y dos para la hija de su compañero concejal, ante lo que, visiblemente airado, increpó al joven que había leído el resultado, diciéndole que' había cantado mal los votos. El muchacho respondió que había leído lo que ponían las papeletas. La respuesta del concejal fue tajante: "En mi casa no se chilla", por lo que el joven tuvo que marcharse del domicilio del edil.

Reina designada

Inmediatamente, aparecieron en el pueblo los programas oficiales de estas fiestas -que comienzan mañana-, en los que ya aparecía la foto como reina de las fiestas de la hija del concejal, con una escuálida corte de damas de honor, dos, cuando debieran ser cuatro, como es constumbre en Quero. El concejal dijo que la designación se había llevado a cabo en votación de la Corporación, cosa que no responde a la realidad, ya que ningún concejal del PSOE -uno- ni del PCE -dos fueron convocados, ni hubo reunión a este efecto de los restantes miembros del Ayuntamiento -UCD, tres, e independientes, tres-.La elegida por votación popular, Julia Miguel Castellanos, es nieta del tío Carpena, abuelo paterno que fue alcalde de Quero en tiempos de la República.

La actitud del concejal de festejos parece contar con la anuencia del alcalde, Carmelo Baillo, de UCD, protagonista a su vez de actuaciones similares, como el intento de agresión que protagonizó hace dos meses en el Pleno contra un concejal comunista, Juan Valdepeñas, que quedó así reflejado en el acta, a petición de este último: "Se levantó de su silla y, dirigiéndose hacia él con intención de agredirle, le dijo: Juan, me tienes hasta los cojones con tantas observaciones; cuando nos veamos solos, te voy a saltar los sesos".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_