Triunfalismo militar iraní en su guerra con Irak
ENVIADO ESPECIAL Irán parece firmemente resuelto a proseguir la guerra en el interior de Irak. Qassem Ali Zahirnajad, jefe del Estado Mayor iraní y segundo jefe, tras el imán Jomeini, de las Fuerzas Armadas de su país, dijo ayer en Teherán que "la guerra debe continuar hasta el aniquilamiento completo de Sadam Husein".
Por su parte; Moshen Rezai, comandante en jefe de los Guardianes de la Revolución (Pasdarán), aseguró que "debemos destruir Israel, ese tumor canceroso de esta región, para lo cual no tenemos más remedio que atravesdr Kerbala (la ciudad santa chiita enclavada a quinientos kilómetros de la frontera iraní, sobre el territorio de Irak, y a poco más de cien kilómetros de Bagdad)".
Tras estas manifestaciones de dos de los más importantes responsables militares iraníes no se oculta que aparecen nuevos factores de optimismo, desde el punto de vista de Irán, sobre el curso de los combates. Según la información oficial, Irán ha penetrado doce kilómetros en el interior del territorio vecino y mantiene consolidadas sus posiciones sobre un área de 150 kilómetros cuadrados.
Según las fuentes citadas, el núinero de prisioneros capturados al Ejército enemigo es de 42.000, sobre una población militar que en Irán se cifra en dos millones de soldados potenciales. De acuerdo con estos datos, el coronel Zahirnajad aseguró que esta suma de prisioneros equivaldría, en Irán, a 170.000 prisioneros iraníes en poder de Irak, lo cual no es, evidentemente, el caso.
Para arropar el alcance de las pérdidas causadas al enemigo, Moshen Rezai, jefe de los pasdaranes, dijo que Irak haperdido en lo que va de guerra 90.000 de sus hombres, 170.000 más han sido heridos y, tres de sus más importantes divisiones han, sido desmanteladas desde el cúmienzo de la operación Ramadán el pasado trece de julio.
Las pérdidas atribuidas al enemigo en material militar son bastante elevadas, sobre todo en carros de combate, una parte de los cuales ha sido arrebatada intacta, de tal modo que, según las fuentes militares iraníes, entrarán en combate a corto plazo, pero en esta ocasión desde el bando iraní.
Por su parte, las Fuerzas Armadas iraquies, se reconoce desde Teherán, mantienen nudos de actividad en el área fronteriza occidental de Irán. Los bombardeos sobre esta zona son continuos.
Hasta el momento no se han proporcionádo datos sobre las pérdidas iraníes, y las posiciones ocupadas no aparecen más que en los mapas específicos del alto mando militar, cuyo acceso no está permitido a los periodistas. Todo parece indicar que las tropas iraníes han recompuesto parcialmente sus líneas sobre el territorio enemigo durante los encarnizados combates allí librados durante las pasadas 72 horas.
