Favorable acogida al pacto propuesto por Escuredo

A pesar del voto negativo de los partidos minoritarios, y de las críticas expresadas por los portavoces de aquellos al programa de actuación económica expuesto por Rafael Escuredo -elegido el jueves primer presidente del Gobierno autónomo andaluz, con 66 votos a favor y 39 en contra-, tanto las centrales sindicales como la principal organización empresarial de la región andaluza han acogido favorablemente la oferta de un pacto económico y social, con la lucha contra el paro como objetivo prioritario.Tanto Manuel Martín Almendro, presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), como distintos líderes de CC OO y, lógicamente, de UGT, han manifestado una predisposición positiva hacia el diálogo y la concertación que Escuredo planteó en su discurso de investidura, y que reiteró en sus respuestas a las críticas recibidas desde la oposición de derecha y de izquierda. Si bien este prejuicio favorable se presenta cuajado de reservas, el pacto puede ser una realidad, aunque no en fecha inmediata.

Rafael Escuredo anunció al final de la sesión de investidura que en septiembre convocará a todas las fuerzas económicas, sociales y financieras de Andalucía con el fin de abordar la elaboración de un nuevo plan de urgencia para esta comunidad. El próximo nombramiento de Juan Manuel Castillo, secretario de la Feria de Muestras Iberoamericana de Sevilla, como consejero de Comercio, Turismo y Transportes, decidido a última hora, pese a la oposición de algunos sectores socialistas, ha sido interpretado generalmente como un intento de acercamiento del presidente a la patronal andaluza y de superación de los enfrentamientos que se produjeron durante la campaña electoral.

Castillo es un independiente muy vinculado al vicepresidente de la CEA, Juan Salas, compañero de estudios de Rafael Escuredo y que, pese a las declaraciones oficiales, nunca estuvo plenamente identificado con el tono agresivo de la campaña que realizaron los empresarios antes del 23 de mayo. En medios socialistas se confía, para redondear esta operación, en que la cúpula de la CEA sea renovada en el otoño y que desaparezca de la misma el malagueño Martín Almendro. Lógicamente, el pacto social auspiciado por Escuredo no podría concretarse si el país entra a la vuelta de las vacaciones en una dinámica preelectoral.