Israel intensifica la represión en Cisjordania y Gaza
Al margen de lo que ocurre en Beirut, donde las negociaciones para obtener la salida de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) avanzan en zig-zag, las autoridades israelíes han relanzado su ofensiva en los territorios ocupados -Cisjordania y Gaza- e intentan intimidar a los alcaldes palestinos que se niegan a cooperar con la administración civil instaurada por el ministro de Defensa judío, Ariel Sharon.En pocos días, el Gobierno militar israelí ha cerrado la Universidad de Bir-Zeith durante tres meses, ha disuelto el municipio de Gaza, cuyo alcalde, Rashad Shawa, se ha negado a doblegarse ante las órdenes del profesor Menájem Milson, jefe de la administración civil de los territorios ocupados.
El administrador civil de la región de Gaza, el general Luns, había dirigido un ultimátum al alcalde de Gaza para adoptara las siguientes decisiones: cooperar con la administración civil, no participar en actividades políticas y abstenerse de hacer declaraciones a la Prensa.
El alcalde de Gaza se ha negado a aceptar este ultimátum, por lo que se decidió la inmediata disolución de la alcaldía de esta ciudad, lo que eleva a seis el número de municipios disueltos hasta ahora por insubordinación en los territorios ocupados.
"Comprometerme a no hacer más declaraciones políticas sería traicionar mis obligaciones respecto a mi pueblo, el pueblo palestino, sometido desde hace quince años a la ocupación israelí", ha declarado el alcalde de Gaza.
"El Gobierno militar sabe que nos oponemos a la autonomía y quiere echarnos, eliminarnos de la escena política", agregó Rashad Shawa.
Por el contrario, el alcalde de Belén, Elías Freij, deploró una lucha que considera "inútil" contra la Administración israelí.
"Es el ministro de Defensa el que ha nombrado hoy al administrador civil, como ayer lo nombraba el gobernador militar. No es razonable cooperar con el gobernador militar y negarse a dialogar con el administrador civil, los dos nombrados por Israel. Al negarnos, caemos en la trampa tendida por las autoridades israelíes, que han elegido ese medio para desembarazarse de los alcaldes elegidos por la población palestina", afirma Elías Freij.
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