El Ayuntamiento de Rentería destituye al jefe de la Policía Municipal

La Corporación municipal de la localidad guipuzcoana de Rentería acordó ayer en el curso de un pleno extraordinario la destitución del jefe de la Policía Municipal de esta localidad, Jesús María Bagüés, hombre próximo a Herri Batasuna, por su presunta responsabilidad en la explosión de la bomba que causó gravísimas heridas al niño Alberto Muñagorri.

La propuesta, planteada por los representantes de Euskadiko Ezkerra, salió adelante con el apoyo de los poncejales socialistas, pese al rechazo de los miembros de HB, coalición a la que pertenece el alcalde de la localidad; Sabino Olaizaola, y que se ha quedado en minoría al abstenerse en la votación los cinco concejales del PNV.

La destitución tiene carácter provisional en tanto la comisión de investigación formada a raíz del suceso no establezca definitivamente sus conclusiones. En otro pleno, que tuvo lugar la noche del mismo sábado en que se produjo la explosión, Euskadiko Ezkerra presentó una moción solicitando en similares términos el cese del jefe de la Policía Municipal. La propuesta fue entonces aprobada con idénticos votos pero no fue ejecutada al aceptarse en la misma sesión otras mociones con cuyos contenidos podría estar en contradicción.

El destituido jefe de la Policía Municipal de Rentería fue uno de los abogados que intervinieron en el proceso de Burgos.

Hace dos meses fue destituido como titular de distrito por el decano de los jueces de primera instancia de San Sebastián.

Diferentes medios políticos de Rentería le hacen responsable de haber utilizado los vehículos de la Policía Municipal de esa localidad para el traslado de simpatizantes de HB al entierro de Telesforo Monzón, que se desarrolló en Vergara.

Los mismos medios acusan a Jesús María Bagüés de haberse inhibido durante el asalto al batzoki (sede de partido) del PNV que tuvo lugar hace ya meses por parte de grupos integrados por jóvenes abertzales.

Advertencia de los jueces

Por otra parte, la junta de jueces de la Audiencia Provincial de Guipúzcoa ha salido al paso de las manifestaciones que han venido realizándose en los últimos días sobre responsabilidades de organismos, corporaciones o personas supuestamente involucradas en el caso del niño Alberto Muñagorri, alcanzado por la explosión de una bomba en Rentería, y ha anunciado que cualquier decisión para decantar o depurar responsabilidades criminales corresponde exclusivamente a su competencia. El acuerdo, adoptado unánimemente por los seis jueces que componen dicha junta, sostiene que estas manifestaciones contrápuestás no tienen otro alcance que el de opiniones realizadas a título particular.En los medios judiciales de San Sebastián, este acuerdo se interpreta como una reacción a las declaraciones realizadas recientemente por el gobernador civil de la provincia, Pedro María Arístegui en las que se hace responsable exclusivo del suceso a la Policía Municipal de Rentería.

El sumario abierto para establecer las presuntas negligencias en que habrían incurrido los organismos o personas involucradas en el caso está dirigido por el Juzgado de Instrucción número 2 de San Sebastián. Este Juzgado ha tomado declaración a una decena de policías municipales de Rentería, a miembros del Cuerpo Superior de Policía y a policías nacionales, así como a diferentes vecinos de Rentería, entre ellos a Angel Calvo Pindado, quien comunicó al 091 de la policía la existencia de la mochila sospechosa, sobre las cuatro de la madrugada del sábado. La explosión tuvo lugar pasadas las doce del mediodía.

Mientras, el niño Alberto Muñagorri continúa evolucionando favorablemente dentro de la gravedad de su estado, según informaron ayer fuentes médicas de la Cruz Roja de San Sebastián.