Las actividades paralelas y los espectáculos callejeros dan un aire lúdico a la Feria del Libro de Barcelona

Los dos centros editoriales más potentes, Barcelona y Madrid, ofrecen en estos días la imagen ciudadana de la salida de los libros a la calle y del intercambio de la producción editorial. Tanto los editores como los autores presentan y firman las novedades de la presente temporada en todos los géneros literarios. Ambas ferias permanecerán abiertas hasta el domingo. La de Barcelona, en el paseo de Gracia, se compone de 200 expositores, y la de Madrid, con 235 casetas, ocupa su lugar habitual en el Retiro.

La VI Feria del Libro de Barcelona ha registrado en sus cuatro primeros días un número ligeramente mayor de visitantes que el pasado año, si bien las ventas se mantienen en cifras similares. Paralelamente se siguen produciendo los espectáculos callejeros, mimos, payasos, faquires, y el domingo se celebró el primer concurso de pintura rápida, en el cual fueron seleccionadas unas cuarenta obras, que se exponen en una galería barcelonesa. El veredicto del jurado será dado a conocer mañana, miércoles. Todos estos actos le dan a la feria un aspecto lúdico que la hace atractiva.La mayoría de los libreros y editores expositores en la VI Feria del Libro de Barcelona coincidieron ayer en manifestar que el número de visitantes es superior al de años anteriores, registrándose una mayor afluencia durante el sábado y el domingo. Sin embargo, las ventas se mantienen, e incluso se da la circunstancia de que el día que más libros se vendieron fue el viernes pasado, día de la inauguración. "El público del fin de semana mira, pero apenas compra", comentó un librero a este diario.

Los compradores se inclinan fundamentalmente por la novela de aparición reciente y los fascículos encuadernables, de los que hay una amplia gama en la feria.

Durante la mañana del domingo se produjo el primer concurso de pintura rápida, y todos los días se han venido proyectando películas en la filmoteca dentro del ciclo Cine y literatura. Hoy se proyectará El poder y el deseo, de Manuel de Pedrolo; In memoriam, de A. Bioy Casares, y Pascual Duarte, de Camilo José Cela, mientras que para mañana, miércoles, está prevista la proyección de Mariona Rebull, de Ignacio Agustí; El proceso, de Kafka, y La muchacha de las bragas de oro, de Juan Marsé.

Barroco entre libros

A lo largo del recinto ferial se han instalado ocho tarimas en las que diariamente actúan los Hermanos Toto, payasos; los Bernals, acróbatas; el faquir Kirman; los marionetistas Jordi y Tela, del grupo Els Farsants, y varios grupos de música clásica, como el Cuarteto de Música de Viento, que interpreta piezas clásicas y populares, y el Grupo de Música Clásica de Cuerda, cuyo repertorio consiste, mayoritariamente, en obras del barroco.

Durante el pasado fin de semana actuaron los grupos de Castellers y Bastoners, y el próximo fin de semana lo hará el grupo de danza popular San Isidro, de Hospitalet.

Se espera que el día de mayor afluencia sea el próximo viernes, día 11, al que los organizadores han denominado Día del Autor. Ese día asistirán a la feria los autores y firmarán los libros que les sean solicitados. Por la tarde, el Día del Autor concluirá con la mesa redonda dedicada a cine y literatura y la presentación del opúsculo titulado Portada, editado por la comisión de la feria y dedicado al ciclo cinematográfico.

Hasta el próximo domingo seguirá la misma tónica en el espacio urbano formado por el paseo de Gracia y las calles Caspe y Gran Vía, con una afluencia de visitantes que aumenta sensiblemente los fines de semana y la festividad del próximo jueves, que se encuentran, además de los libros, con la improvisación de los espectáculos al aire libre.