El Gobierno estudia la oferta de pactos sobre la financiación del transporte urbano

El PSOE espera negociar con el Gobierno en los próximos días una salida a los déficit del transporte público municipal. La postura del Ejecutivo iba a ser fijada ayer tarde en una reunión de los cuatro ministros implicados (Economía, Hacienda, Transportes y Administración Territorial). De cara a la negociación, los socialistas han reforzado sus posiciones con una encuesta entre 42 empresas de dieciséis países, según la cual en los últimos veinte años se ha deteriorado la viabilidad financiera de todas ellas y ha aumentado la necesidad de apoyo de los poderes públicos.

Tras el informe, encargado a una comisión de expertos para superar la ruptura del pacto Gobierno-PSOE en tomo al proyecto de ley sobre la financiación del transporte municipal (véase EL PAIS del pasado viernes), los socialistas han ofrecido ya al Ejecutivo negociar el tema. La respuesta de, un representante del Gobierno ha sido esperar a los resultados de dicha reunión ministerial.En principio, las expectativas en medios socialistas van desde cierta esperanza, fundada en la voluntad política de algún ministerio, a un acusado pesimismo, basado en las recientes experiencias y en la íntima relación entre los problemas del transporte público urbano y la gestión municipal, que puede ser utilizada electoralmente. Los mismos medios señalan que la proximidad de las elecciones andaluzas y generales no facilita ciertamente las soluciones: diez de los catorce ayuntamientos con déficit en el transporte están en manos socialistas; de los otros cuatro, uno depende del PSA (Sevilla) y otro del PCE (Córdoba).

No obstante, el informe encargado a la comisión de expertos por el ministro de Hacienda y el secretario federal de Política Municipal del PSOE es considerado por fuentes gubernamentales y del PSOE como una base de partida fundamental para llegar a acuerdos que desaparquen el proyecto de ley, ya dictaminado por la correspondiente comisión del Congreso. Es compartido en especial el sustrato de que la responsabilidad del transporte público debe recaer íntegramente, a mayor o menor plazo, en los ayuntamientos, y sus déficit deben ser pagados por los beneficiarios más próximos mediante recargos en impuestos.

La situación en el mundo

En el informe internacional citado, realizado en dieciséis países industrializados donde existe economía de mercado por el británico J. E. Allen, director financiero del London Transport Executive, es muy dispar la posición de los servicios municipalizados españoles con mayores problemas. Mientras la EMT madrileña figura a la cabeza de las 42 empresas en cuanto a cobertura de gastos corrientes con tarifas (el 79,69% en 1981), Barcelona se sitúa en los últimos puestos.La parte de costes no cubierta vía tarifas es atendida en la generalidad de los dieciséis países mediante ayudas financieras de los poderes públicos.

En conjunto, las empresas examinadas, servían en 1979 a 60 millones de habitantes; la ayuda media percibida por habitante, era de 4.538 pesetas al año. En este apartado destacaba Barcelona, con 12.238 pesetas, seguida por Estocolmo, Berlín y Helsinki, con algo más de 10.000 pesetas en cada caso. Filadelfia, Londres y Zurich figuraban en últimos puestos, con menos de 5.000 pesetas.