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BARCELONA

Jaime Malaver, una esperanza

Fernando Rivera dio la nota de valentía y oficio a lo largo de la tarde. Dos faenas parejas en las que destacó siempre el buen temple y la sobriedad con que llevó toreados a sus novillos, el primero con cierto peligro por el pitón izquierdo. De estocada trasera y algo tendida despachó a su segundo, del que mereciera más premio de lo obtenido.Muy noble el segundo de la tarde, destacó con él Curro Durán en unos naturales largos, pues su virtud principal es la longitud que imprime a los pases. Novillo y torero se conjugaron, aún estando la bondad de aquél por encima de la innegable pompa del torero. El quinto llegó a la muleta por embestida corta, abreviando sin mayor lucimiento del espada.

Plaza de Barcelona, 2 de mayo

Novillos de los Guateles, de bonita estampa, bravos y en conjunto nobles. El segundo ovacionado en el arrastre.Fernando Rivera, nuevo en esta plaza, salida al tercio; vuelta al ruedo. Curro Durán, oreja y dos vueltas; salida al tercio. Jaime Malaver, nuevo en esta plaza, silencio y silencio.

Jaime Malaver, toreó en sustitución del gitano Alejandro Jiménez. Los novillos que le correspondieron, en especial el sexto, eran de escándalo. El muchacho está poco placeado pero en algunos momentos nos brindó un mágico y sugestivo toreo de calidad que nos hace concebir una positiva esperanza. Han sido fugaces pero centelleantes naturales, sin ligar, que como decirnos nos invitan a verle nuevamente.

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