Oliart afirma que su departamento tiene previsto trasladar la División Acorazada fuera de Madrid

Reducir el número de efectivos humanos del Ejército, mejorando la calidad de las unidades, alejar los acuartelamientos de los cascos urbanos, garantizar el control del eje estratégico Baleares-Estrecho-Canarias y reforzar al máximo las posibilidades de defensa de Ceuta y Melilla para hacer frente a un hipotético ataque marroquí son algunos de los temas esenciales contenidos en el documento, en un principio secreto, que Alberto Oliart presentó ayer a la Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados. El ministro inistió en las magníficas relaciones de España con Marruecos. Sobre el problema de las unidades en los núcleos de población, y refiriéndose en concreto a la División Acorazada Brunete, dijo el ministro: "Vamos a sacarla de Madrid".

Las ventajas de la integración de España en la Alianza Atlántica, entre ellas la "recuperación de Gibraltar para conseguir una auténtica integridad nacional, de acuerdo con la resolución de la ONU"; la modernización del armamento, dando preferencia al abastecimiento de las industrias militares nacionales, y la declaración taxativa de que la seguridad interior se garantizará mediante las fuerzas civiles, es decir, los cuerpos de seguridad del Estado, son otros puntos clave del documento.El ministro Oliart, al analizar la situación defensiva, dijo, entre otras cosas, que "España es muy sensible a las fricciones o inestabilidades que puedan producirse en el noroeste africano". En palabras del diputado socialista experto en temas de defensa. Luis Solana, "el Gobierno español tiene absoluta consciencia de que las autoridades marroquíes podrían seguir el ejemplo del general argentino Galtieri y ocupar por la fuerza Ceuta y Melilla".

La referencia al reforzamiento defensivo de ambas ciudades españolas es constante a lo largo del documento: "Respecto al noroeste africano, nos preocupa la posible inestabilidad de algunos de sus regímenes políticos. La estrategia inmediata de la URSS podría poner en peligro nuestra integridad territorial explotando adecuadamente los eventuales estados de tensión en esa zona geográfica". Y también: "Hay que renovar parcialmente el material de las guarniciones de Ceuta y Melilla, así como dotarlas de nuevos materiales; entre ellos, los misiles contracarro de medio y corto alcance", entre otras medidas.

Asimismo, el ministro se refirió al plan de infraestructura previsto para el Ejército de Tierra, del que, dijo, tiene por objeto resolver el problema que supone el que gran parte de los acuartelamientos estén ubicados dentro de los cascos urbanos y en edificios antiguos, así como proporcionar una infraestructura adecuada al despliegue y concentrar unidades para economizar medios.

Sobre este punto concreto del documento, en respuesta a una pregunta del diputado socialista Enrique Múgica sobre por qué está en Madrid la División Acorazada Brunete, Oliart respondió: "Bueno, porque cuesta muchos miles de millones sacarla, pero vamos a sacarla. Está en proyecto de este Ministerio que la DAC tenga un despliegue distinto".

Más calidad y menos cantidad

Entre los principales objetivos de la política de defensa, el documento cita la modernización del Ejército, corrigiendo deficiencias orgánicas y modernizando los materiales con el fin de "conseguir no mayor número de unidades", dice textualmente, "sino que éstas sean más modernas y operativas que en la actualidad. Paralelamente se están realizando estudios conducentes a una apreciable reducción de los efectivos humanos".

Respecto a la integración de España en la Organización para el Tratado del Atlántico Norte (OTAN), el documento defiende la imposibilidad de una supuesta neutralidad española, debido a, la importante posición geoestratégica de nuestro país. "En un conflicto generalizado", se cita en el documento, "sería imposible que esta supuesta neutralidad fuera respetada por los beligerantes". Cuando España sea miembro de la OTAN, esta circunstancia "forzará a las grandes y medianas potencias a intervenir de alguna forma en el caso de un conflicto local y particularizado que implique a España".

Dado que España "está inmersa en el mundo occidental y los intereses vitales de éste son indisociables de los intereses marítimos occidentales", prosigue el docurrien to, "nuestra posición nos permite contribuir a asegurar las comunicaciones marítimas del Mediterráneo, controlar -e impedir en, su caso el tráfico por el Estrecho de Gibraltar (cifrado en el paso de un barco cada nueve o diez minutos, con una media diaria de 130 barcos que cruzan actualmente el Estrecho) y dar seguridad a la zona de las rutas marítimas atlánticas".

En cuanto a los objetivos de cárácter interior, destaca el conseguir un fortalecimiento de la con ciencia nacional para lograr la mayor identificación posible entre el pueblo y las Fuerzas Armadas; en la empresa común de la defensa. En este apartado se dice textualmente: la seguridad interior se garantizará mediante las fuerzas o cuerpos de seguridad del Estado.