Entrevista de Haig con el ministro argentino de Asuntos Exteriores

El secretario de Estado norteamericano, Alexander Haig, se entrevistó ayer en Washington con su homólogo argentino, Nicanor Costa Méndez, para discutir sobre la crisis de las Malvinas, informó un portavoz del Departamento de Estado.

Antes del encuentro con Costa Méndez, Haig tenía previsto mantener entrevistas por separado con el embajador de Gran Bretaña en Estados Unidos, sir Nicolas Henderson, y con el embajador argentino en Washington, Esteban Takacs.

El presidente norteamericano, anunció el pasado lunes que Estados Unidos estaba dispuesto a hacer "todo lo indispensable" para ayudar a Gran Bretaña y a Argentina a conseguir un arreglo pacífico en el conflicto de las Islas Malvinas.

En su intervención, el presidente Ronald Reagan reconoció que se trata de "una situación muy difícil para Estados Unidos porque es amigo de los dos países involucrados en esta querella".

No obstante, el primer mandatario norteamericano se declaró optimista en el fondo: "Creo que se pueda conseguir una solución pacífica", y confió en que no se llegase a una confrontación.

Simultáneamente a las declaraciones del presidente norteamericano, el Departamento de Estado hizo público un comunicado en el que justificaba la ayuda logística que las fuerzas armadas de Estados Unidos prestarán a la flota británica cuando esta se reagrupe en la isla de Ascensión, donde según diversas informaciones están acudiendo aviones "Hércules C-130" de abastecimiento.

Dean Fisher, portavoz del Departamento de Estado, aseguró que las instalaciones norteamericanas en la isla de Ascensión, situada entre la costa norte de Brasil y las costas africanas, están sometidas al acuerdo norteamericano-británico de 1962.

Según este acuerdo, las tropas de Estados Unidos se comprometen a prestar todo el apoyo logístico que requieran las fuerzas británicas que lleguen a la isla, las cuales tienen todo el derecho a utilizar sus instalaciones militares.