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Oliart advierte que cualquier ataque al Rey lo es también a las Fuerzas Armadas

El ministro de Defensa, Alberto Oliart, dijo ayer, en el curso de un acto castrense celebrado en Madrid, que cualquier ataque al Rey y al ordenamiento constitucional es un ataque al conjunto de las Fuerzas Armadas y al concepto de lealtad, principio básico de la disciplina de los Ejércitos. Con estas palabras, el ministro salía al paso de la campaña difamatoria desatada recientemente contra la Corona desde la sala donde se desarrolla el juicio contra los golpistas del 23-F, cuya repulsa ha sido ya puesta de manifiesto por el Gobierno y los principales partidos democráticos.

El acto castrense al que asistió Alberto Ollart se celebró en el Cuartel General del Ejército y consistió en la imposición de condecoraciones a más de treinta militares, la mayoría miembros del Ejército de Tierra. Las personalidades distinguidas, entre las que se encontraban también varios civiles y la viuda de un brigada muerto en el curso de un atentado. terrorista, recibieron las condecoraciones de manos del ministro de Defensa y del jefe del Estado Mayor del Ejército, teniente general Ramón de Ascanio.Entre los condecorados se encontraban el ex jefe del Estado Mayor del Ejército teniente general José Gabeiras, para quien tuvo el ministro Ollart palabras de agradecimiento y de reconocimiento por su labor en los últimos anos, así como el almirante Juan Carlos Muñoz, recientemente relevado al frente de la Capitanía General de la Zona Marítima del Mediterráneo; el teniente general Emilio Barañano, jefe del Mando Aéreo de Transporte del Ejército del Aire, y el director de Defensa del Instituto Nacional de Industria, Gabriel Peña. Todas estas personas recibieron la Gran Cruz de la Orden del Mérito Militar con distintivo blanco.

Otro de los militares condecorados en este acto fue el ex coronel jefe del Regimiento Ligero Acorazado de Caballería Villaviciosa 14, Joaquín Valencia Remón, que recibió la Gran Cruz de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo.

Tres personas tomaron la palabra en el transcurso del acto. En primer lugar, el civil Gabriel Peña, que destacó la integración de personal no militar en las tareas de la defensa nacional, y recordó la importancia del proyecto de ley de dotaciones presupuestarias para las Fuerzas Armadas, recientemente remitido por el Gobierno a las Cortes. Le siguió el almirante Muñoz, que hizo una calurosa defensa de la Corona, pidiéndole al ministro que hiciera llegar al Rey la más absoluta fidelidad y lealtad de todos los allí presentes.

Alberto Oliart cerró el acto con las palabras ya citadas, recordando que las Fuerzas Armadas tienen asignada una misión muy concreta en el ordenamiento constitucional, para el que pidió el más absoluto respeto. "Hay una misión encomendada a las Fuerzas Armadas por la Constitución", dijo el ministro de Defensa en este sentido. "Esa misión en distintos objetivos tiene uno que es la defensa del orden constitucional. Ese orden se basa en tres instituciones básicas: el poder ejecutivo, el Gobierno; el poder legislativo, que pertenece al Congreso y al Senado, y el poder judicial". "Y por encima", añadió, "como arquitraba de todo este orden constitucional está la Corona y está el Rey, jefe supremo de las Fuerzas Armadas, a cuyo mando supremo éstas están ligadas".

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