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El Museo de Ciudad Real abrió por fin sus puertas

A pesar de que algunas guías turísticas venían llamando Museo Provincial a los fondos artísticos de la Diputación, hasta ayer mismo no abrió sus puertas al público el verdadero museo, tras sufrir cerca de nueve años un cautiverio burocrático un tanto suirrealista. El acto contó con la presencia de Pilar Ibáñez de Calvo Sotelo, la ministra de Cultura, Soledad Becerril, y el director general de Bellas Artes, Javier Tusell.El largo cautiverio padecido se remonta a 1973, año en que se iniciaron los primeros contactos con la Administración. Fue en 1976 cuando un real decreto lo crea oficialmente. Desde entonces hasta ayer mismo, en palabras del presidente de la Diputación, "se apodera del proyecto una auténtica maraña jurídico-administrativa difícil de desentrañar", en la que estuvieron implicados la Administración central, la Diputación provincial y la empresa constructora, al tiempo que las promesas de apertura de los distintos ministros de Cultura de la transición política se sucedían una tras otra.

El edificio de cuatro plantas y un ático fue diseñado por el arquitecto Carlos Luca, de Tena Alvear, que lo tenía ya terminado a fines de 1977. La innovación quizá más interesante de este Museo y lo que le da un cierto carácter vanguardista es la incorporación de otras artes poco usuales en la mayoría de los museos provinciales, como son la arquitectura, representada en obras de Miguiel Fisac, la fotografía, el cómic y el diseño.

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