Impuesta una multa de 765 millones a la empresa propietaria de la central nuclear de Aseó

El Ayuntamiento de Ascó, localidad de la comarca del Baix Ebre, decidió el pasado domingo imponer una multa de 765 millones de pesetas a la empresa Fuerzas Eléctricas de Cataluña, SA (FECSA), propietaria del grupo primero de la central nuclear ubicada en este término municipal. El Ayuntamiento considera que hubo ocultación de datos por parte de FECSA en la declaración de obras a realizar en la central nuclear, a efectos de la liquidación de las tasas municipales.

Los datos manejados por las autoridades municipales, indican que FECSA declaró en su día obras a realizar por valor de 1.543 millones de pesetas, por lo que abonó al Ayuntamiento unos quince millones en concepto de tasas. Más tarde, el Consistorio supo, a través de un informe elaborado por un arquitecto y un ingeniero, que las obras ascendían a más de 16.800 millones de pesetas. Por consiguiente, según las fuentes municipales, FECSA debía haber abonado una cantidad cercana a los 153 millones de pesetas. Los concejales del Ayuntamiento de Ascó acordaron, en el pleno citado anteriormente, aplicar a FECSA las ordenanzas municipales que autorizan al Ayuntamiento a multar con el quíntuplo de la cantidad que debiera haberse abonado en su día. Si la multa. no se hace efectiva dentro de los próximos quince días, se incrementará en un 20% de su importe.

Una larga batalla entre FECSA y el Ayuntamiento

El Ayuntamiento de Ascó está regido por seis concejales que se presentaron a las elecciones con el nombre de Defensa Popular. Los concejales, con su alcalde, Joan Carranza, al frente, se han destacado por su oposición continuada a la central nuclear. Actualmente están en trámite de resolución judicial, a diferentes niveles, órdenes de denegación de licencias de obras, paralización o derribo de diversas partes de los dos grupos con que cuenta la central nuclear, con los correspondientes recursos de las empresas promotoras de la central.A pesar de ello, el primer grupo -FECSA- está terminado, y su entrada en funcionamiento estaba prevista inicialmente para el pasado mes de diciembre. Problemas técnicos han retrasado su puesta en marcha. El segundo grupo -FECSA, Enher, Hidroeléctrica de Cataluña e Hidroeléctrica del Segre- también está prácticamente terminado. El desfase, respecto al grupo anterior, es de, aproximadamente, un año.El último contratiempo para la puesta en marcha del primer grupo de la central nuclear ha sido la sentencia de la Audiencia Nacional que anula las concesiones que en su día hiciera el Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo para el aprovechamiento de aguas del Ebro por parte del central. Diez ayuntamientos del bajo Ebro y la Diputación Provincial de Tarragona recurrieron contra la orden ministerial.