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Robó doce millones para hacer frente a los gastos que le ocasionaba el bingo

Un conductor de 44 años, casado, ha sido detenido como presunto autor de una larga serie de hurtos por un valor global de doce millones de pesetas, cuyos beneficios empleaba en jugar al bingo. La policía ha arrestado también a otras siete personas por su supuesta responsabilidad en la compra del material robado.El primero de los detenidos, José Justo García Salamanca, trabajaba como conductor en el establecimiento Hergar, de la calle de la Marroquina, 10, dedicado a la venta de artículos de cocina, fontanería y, saneamiento. Desde unos tres años atrás, el propietario había notado continuamente una inexplicable falta de mercancías, que sometía al negocio a una fuerte sangría económica. Las dificultades financieras determinaron que tuviese que vender varias propiedades y que despidiese a todos sus empleados, salvo el conductor y una secretaria. Sin embargo, la progresiva falta de material determinó que finalmente decidiera denunciar el caso: para entonces calculaba las pérdidas en unos doce millones de pesetas.

Según la policía, las sospechas recayeron desde un principio en José Justo García, el conductor, que fue sometido a vigilancia intensiva. Finalmente, y en la furgoneta DKW propiedad de la firma, los investigadores descubrieron un depósito de material que el detenido no pudo justificar. Al parecer, había dedicado a jugar al bingo el dinero que conseguía con la venta de los artículos desaparecidos en los tres años anteriores del negocio de su patrón. Más tarde, los policías recuperaron cincuenta cajas de azulejos, armarios de baño, calentadores, bañeras, cañerías y otros efectos, evaluados en más de dos millones de pesetas.

Otras siete personas han sido arrestadas como compradoras del material: Antonio Cruz, de 46 años, chatarrero; Luis Prados, de 41; Antonio García Salamanca, antiguo empleado del establecimiento y hermano del conductor; Constantino García, de cuarenta años, industrial; Julián Fernández, fontanero autónomo, y los también fontaneros Francisco Gallardo, de 32, y Manuel Cortés.

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