Al borde del abismo
"Nuestro país se encuentra al borde de un abismo. La estructura estatal ha dejado de funcionar; tenemos que hacer algo antes de que nos veamos envueltos en una guerra civil. Con estas palabras, acompañadas de una dura acusación contra los dirigentes de Solidaridad que "amenazan con el uso de la fuerza, que no acatan la ley", el general Wojelech Jaruzelski, primer ministro y primer secretario del partido comunista de Polonia, se dirigió por radio y televisión "a todos los polacos".Jaruzelski anunció la creación de un consejo militar de salvación nacional y la declaración del estado de guerra (similar al estado de excepción en otros paises) en todo el territorio. El alto militar aseguró que "el ejército no sustituirá al gobierno civil", y recalcó que la alianza con la URSS sigue constituyendo la piedra de toque de la razón de Estado polaca".
El primer ministro lanzó sucesivos llamamientos a las fuerzas de seguridad (para que "defiendan al pais contra el enemigo"), a los militares (exhortándoles a la fidelidad al juramento del soldado"), a los campesinos (para que "no dejeis morir a vuestros compatriotas"). Asimismo, solicitó "comprensión" de la opinión pública mundial.
Jaruzelski anunció el "internamiento" de Edward Gierek, exprimer secretario del Partido Obrero Unificado Unificado (POUP) y del equipo gubernamental que, junto a él, resultó culpable, en los años 70, de una mala gestión".
El general Jaruzelski apeló a la no violencia, "a fin de que no de derrame una sola gota de sangre polaca", y pidió a los "trabaladores" que "sepan renunciar provisionalmente a su imprescindible derecho a la huelga".
"Los destinos de nuestro país dependen de la actitud que adoptemos en estos momentos, ha llegado la hora de la gran prueba", acabó diciendo, mientras citaba una de las frases del himno nacional que se escuchaba en el fondo: "Polonia no perecerá mientras nosotros vivarnos" .
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
El Louvre, en su punto más bajo: ¿qué le pasa al museo más famoso del mundo?
Kate Winslet nos habla de su debut como directora (y de lo difícil que sigue siendo ser mujer en el cine)
La Administración de Trump publica (a medias) los papeles de Epstein: ¿cuáles son las principales novedades?
Cómo llegaron los líderes europeos al acuerdo para financiar a Ucrania
Lo más visto
- Uno de los promotores de la señal V-16 de tráfico: “Es duro oír el testimonio de víctimas que han sufrido amputaciones al poner los triángulos”
- Más de 40 congresistas demócratas piden por carta a Trump que cese en sus “intentos de socavar la democracia en Brasil”
- Cae una organización que enviaba camiones cargados de cocaína desde Marbella hasta varios países europeos
- La policía registra varios domicilios y las oficinas de la ministra francesa Rachida Dati por otro presunto caso de corrupción
- Manuel Castells, sociólogo: “El mundo está en un proceso de autodestrucción”




























































