A los seis años de la muerte de Franco
Hace seis años que fallecía Francisco Franco. El 20 de noviembre de 1975, después de cerca de cuarenta años de gobierno duro e implacable, el viejo caudillo abandonaba filialmente su dominio sobre el país. Desde entonces España se ha rehabilitado a sí misma ante los ojos del mundo. (...)Los años del posfranquismo se han caracterizado por la frustración y la desilusión. Una antipatía generalizada hacia la clase política ha llevado a una profunda apatía hacia los actos electorales. El virtual colapso del centro y la paralización y el oportunismo de la izquierda han dado como resultado un alza en la fuerza y la popularidad de Manuel Fraga Iribarne -una sorprenderite reaparición después de unos años de inactividad-, el hombre que puede llenar el vacío dejado en el corazón de muchos españoles desde la muerte del caudillo. ( ... )
La vida del actual Gobierno se puede medir en meses, tal vez en semanas. ( ... ) Este estar siempre pendiente de la amenaza militar ha sido utilizado muy a menudo para justificar la inacción política y la pusilanimidad, lo que ha afimentado la desilusión popular sobre los frutos de la democracia. A la vez, dicha preocupación sobre la amenaza militar ha servido para dar a los militares mismos una exagerada idea de sus capacidades y les ha permitido extender sus ambiciones al campo político. ( ... )
Pero los responsables políticos deben darse cuenta de que hay un desarrollo aceptable, y que ni Fraga ni Felipe González le darían a España una firme dirección política democrática. Hoy día España debe mirar más allá del golpe militar. Las condiciones para éste: miedo, crisis prolongada, colapso económico, la ruptura social, no existen. ( ... )
19, de noviembre
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