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Pekín justifica su oposición a la boda Shuang-Bellefroid

El Gobierno chino dio claramente a entender ayer que el noviazgo entre el diplomático francés Emmanuel Bellefroid y la contestataria china. Li Shuang no era una historia de amor corriente, al revelar que otro diplomático galo destinado en Pekín había sido autorizado recientemente a casarse con una ciudadana china.La Embajada de China en París anunció ayer que un gendarme de la Embajada de Francia en Pekín, Christian Galliano, se casó el 9 de octubre pasado con la señorita Zhao Jiang, obrera en una fábrica de la capital china. Esta boda, que se desarrolló con gran discreción, fue la primera entre un diplomático galo y una china.

Esta revelación -que se produce veinticuatro horas después de la condena a dos años de "reeducación por el trabajo" a la señorita Li Shuang, pintora, de veinticinco años de edad, novia del diplomático francés Bellefroid- demuestra que las autoridades chinas han querido disociar públicamente ambos casos.

Galliano, destinado en Pekín desde hace trece meses, declaró que tuvo que esperar cinco meses la autorización necesaria para casarse, pero que en ningún momento tuvo dificultades administrativas para realizar sus propósitos.

El primer ministro chino, Zhao Ziyang, dijo a principios de semana al ministro de Estado. francés encargado del comercio exterior, Michel Jobert, que Bellefroid "apoyó, financió y colaboró como intermediario entre los círculos disidentes chinos y extranjeros".

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