_
_
_
_

La ciudad de Yorktown, un escenario histórico para Estados Unidos y Francia

Nada mejor que un escenario histórico como el que hoy conmemora el bicentenario de la batalla de Yorktown, en el Estado de Virginia, para que el presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan, y el presidente de Francia, François Mitterrand, hablen del futuro de la cooperación franco-norteamericana.

Más información
Reagan y Mitterrand se entrevistan hoy en Virginia

Las relaciones Este-Oeste, la cumbre de Cancún, la situación en El Salvador y los problemas de Oriente Próximo son, sin embargo, temas muy distintos de los que hace doscientos años unían a franceses y americanos en su lucha contra los ingleses, en tierras del Nuevo Mundo.Yorktown, en un ambiente multicolor de peculiar belleza otoñal, en esa época del año conocida en Estados Unidos como el verano indio, reúne desde el pasado jueves a unos 5.000 combatientes cuya misión es revivir lo que fue la decisiva derrota y rendición de los británicos frente a las tropas americanas y francesas el 19 de octubre de 1781.

Aunque la guerra continuó hasta 1782 en los Estados de Ohio e IIinois, todos los historiadores coinciden en afirmar que la rendición de Yorktown fue decisiva para la total independencia de EE UU.

Fue en una mañana fría y luminosa del 19 de octubre de 1781, cuando, tras varios días de sitio y duros combates en las llanuras de Yorktown y la bahía de Chesapeake, el general británico Charles Cornwallis decidió la rendición de los 7.200 casacas rojas ingleses y alemanes leales a la corona británica. El general George Washington, que cinco años antes -el 4 de julio de 1776- lanzó la declaración de independencia de trece colonias norteamericanas contra la soberanía inglesa, aceptó la rendición de Cornwallis.

Los franceses, en una alianza con los independentistas americanos que prolongaba su lucha contra Inglaterra en Europa, contribuyeron a la victoria americana en Yorktown. Los 8.000 soldados de George Washington fueron apoyados por 4.500 galos mandados por el mítico y legendario general Lafayette. Francia colaboró también en el combate naval de la bahía de Chesapeake, donde diecinueve barcos suyos atacaron a los veinticuatro navíos británicos, bajo el mando del almirante francés François de Grase.

Cien mil personas no quieren perderse el espectáculo preparado en esta pequeña ciudad costera de Virginia y acuden a ella en un ambiente de gran fiesta. Los populares puestos de venta ambulante de hot-dogs, y hamburguesas con ketchup rivalizan con los restaurantes clásicos de la zona, que ofrecen menús históricos.

Los uniformes, tanto de los casacas rojas como de los continentales, han sido reproducidos de acuerdo con la tradición. Se ha respetado incluso el detalle, nada fácil en esta época, de excluir cualquier fibra-sintética en las telas de los uniformes. Cada par de botas, de estricto estilo colonial, cuesta entre 6.000 y 10.000 pesetas. Cada réplica de los mosquetones Brown Bess, unas 25.000 pesetas. Cada soldado -prueba de que la inflación es histórica e imparable- lleva encima un equipo valorado en unas 100.000 pesetas

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_