_
_
_
_

Solidaridad rechaza las subidas de precios en Polonia

Mientras las subidas de precios anunciadas por el Gobierno polaco, que afectan al tabaco, el pescado y las conservas vegetales, amenazan con crear nuevas tensiones sociales, al ser rechazadas por el sindicato independiente Solidaridad, el ala moderada de esta organización se impuso en la primera ronda de las elecciones para la directiva nacional del sindicato, según los resultados dados a conocer ayer en Gdansk.

El presidente de Solidaridad, Lech Walesa, exigió el domingo que el Gobierno posponga la subida de precios de esos productos hasta que se haya llegado a un acuerdo negociado. El ministro de Hacienda, Marian Krzak, y el jefe de la comisión estatal de precios, Zdislaw Krasinski, acudieron ayer a Gdansk para explicar a los delegados del congreso sindical el motivo de estos incrementos de precios, pero el Gobierno se mantuvo firme en su postura de no revisar el aumento ya decretado. Si el ejecutivo no accede a la petición sindical, varias empresas de la Alta Silesia están dispuestas a ir a la huelga, indicaron fuentes sindicales.Tras la fría acogida que los sindicalistas dispensaron a los dos representantes gubernamentales, las discusiones trascurrieron en un clima altamente polémico. Todos los delegados, con una sola excepción, habían apoyado la decisión de Walesa de pedir la anulación de las subidas de precios. El congreso de Solidaridad hizo pública una resolución en la que calificaba los incrementos anunciados por el Gobierno de "afrenta y provocación al congreso sindical".

La subida, que en algunas clases de tabacos alcanza hasta el 100%, fue justificada por el Gobierno ante la necesidad de adaptar los precios al coste de la producción. El ministro de Hacienda explicó que 5.000 millones de los cigarrillos que se consumen en Polonia son de importación y que la economía polaca no permite ese tipo de sangría de divisas. Polonia es el mayor consumidor de tabaco de Europa.

La reaccion conciliadora del Gobierno que preside el general Jaruzelski, al enviar dos altos funcionarios al congreso de Solidaridad para explicar las causas de las alzas de precios, se explica si se tiene en cuenta que fue precisamente una subida de precios lo que provocó el trágico levantamiento obrero de 1970 en Gdansk y otras ciudades del Báltico.

Después de un largo y, animado debate entre los ministros y los delegados de Solidaridad, en el que abundaron críticas muy duras contra el Gobierno, se acordó suspender la discusión y tratan el tema con los funcionarios gubernamentales en comisiones especiales. A pesar de las fricciones existentes, todo parecía indicar anoche que se camina hacia una cooperación mayor entre el sindicato independiente y el Gobierno.

Por otra parte, la primera vuelta de las elecciones para los 69 puestos de la comisión nacional, órgano legislativo de Solidaridad, dio por resultado una aplastante myoría de votos para los candidatos moderados. Los candidatos radicales no alcanzaron en su mayor parte el número de votos necesarios para ser elegidos y deben someterse, por ello, a una segunda vuelta electoral. Kasimierz Switon, sindicalista de la Alta Silesia, y Bogdan Lis, miembro de la dirección en Gdansk, representantes del ala radical, no fueron elegidos.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_