Conflicto en Oriente Próximo: resumen del 10/02/2025
Trump amenaza con retirar la ayuda a Egipto y Jordania si no aceptan a los desplazados y niega el derecho de retorno para los palestinos | Netanyahu se reúne con altos cargos de Defensa tras el anuncio de Hamás de pausar las liberaciones de rehenes | Israel pone a las tropas en el máximo nivel de alerta


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El presidente estadounidense, Donald Trump, amenazó este lunes que el sábado dará por terminado el alto el fuego si Hamás no ha liberado a todos los rehenes y pausará las ayudas a Jordania y Egipto si no aceptan a los refugiados palestinos que quiere trasladar desde Gaza para construir una “Riviera de Oriente Próximo”, para los que negó el derecho de retorno. Un proyecto que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, calificó de “creativo” y “revolucionario” y que conllevaría el desplazamiento de los más de dos millones de gazatíes que habitan el enclave. Un alto dirigente político de Hamás, Jalil al Hayya, afirmó que el plan de Trump está “condenado” antes de nacer. “Los derribaremos, como hemos derribado otros proyectos anteriores”, aseguró.
Así las cosas, los países mediadores suspendieron este lunes las negociaciones sobre la segunda fase del alto el fuego hasta que Estados Unidos dé “una indicación clara” de su intención de que continúen, según aseguró la agencia Reuters citando fuentes de seguridad de Egipto.
Hamás había anunciado que se paralizaría la entrega de rehenes “hasta nuevo aviso” por los incumplimientos del acuerdo por parte de Israel, a lo que el primer ministro Benjamín Netanyahu respondió reuniéndose con altos funcionarios de Defensa, informó Efe citando a un funcionario del Gobierno. La misma fuente informó de que se adelanta a la mañana de este martes la reunión del Gabinete de Seguridad prevista para esta tarde. Sin embargo, a última hora de la tarde la milicia dejó abierta la puerta a un posible intercambio si Israel “cumple sus obligaciones”.
Asimismo, el ministro israelí de Defensa, Israel Katz, reaccionó a la suspensión de la entrega de rehenes ordenando al ejército que se preparase “al máximo nivel de alerta para cualquier escenario posible en Gaza”, y el principal líder ultra de Israel, Itamar Ben Gvir, pidió bombardear “masivamente” Gaza por tierra y aire e impedir por completo el ingreso de ayuda humanitaria, “incluidos electricidad, combustible y agua”. También reaccionaron al anuncio de Hamás las familias de los rehenes israelíes, que salieron en protesta a las calles para exigir la continuidad de los intercambios. El foro que reúne a muchas de estas familias hizo un “llamamiento urgente” a los países mediadores (Egipto, Qatar y EE UU) para que el alto el fuego no se rompa.
Mientras, en Gaza, el ejército israelí autorizó el paso a pie de los desplazados que regresan al norte de la Franja por la calle de Salahadín, que transcurre paralela a la línea fronteriza con Israel por el centro de la Franja. Hasta ahora solo había permitido el paso en vehículos, previa inspección para garantizar que no transportasen armas o milicianos.
En el norte de Cisjordania ocupada, sin embargo, los ataques israelíes han convertido el campamento de refugiados de Yenín en una ciudad fantasma y obligado a unos 40.000 palestinos a abandonar sus hogares, según denunció la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) denunció que la ofensiva israelí en el norte de Cisjordania ocupada. “Las fuerzas israelíes están utilizando ataques aéreos, apisonadoras acorazadas y detonaciones controladas en Cisjordania, métodos incompatibles con el orden público. Estas tácticas militares han vuelto inhabitables los campamentos del norte, obligando a miles a un desplazamiento cíclico”, denunció el organismo.
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