El Gobierno español enviará próximamente policías nacionales a Guinea Ecuatorial

Ante el deterioro progresivo de la situación en Guinea Ecuatorial, el Gobierno español parece decidido a incrementar su cooperación en todos los órdenes en la antigua colonia española y a reforzar la presencia de España en aquella República, según se desprende de los acontecimientos registrados el pasado fin de semana. Este reforzamiento se puede traducir en el envío inmediato de fuerzas de la Policía Nacional. El pasado sábado llegó aMalabo, en una visita sorpresa sin anuncio previo, el director general de la Oficina de Cooperación con Guinea del Ministerio de Asuntos Exteriores, Jesús Martínez Pujalte, quien, después de ser recibido en el aeropuerto por el director general para Europa y América del Ministerio guineano de Asuntos Exteriores, Pedro N sué, se entrevistó con el presidente del Consejo Militar Supremo y presidente de la República, coronel Teodoro Obiang Nguema.

Aunque Pujalte no reveló el contenido de la entrevista con el coronel Oblang, fuentes competentes informaron a EL PAIS que el funcionario español pudo haber trasladado al líder guliieano la contestación de un mensaje previo dirigido por éste al Rey de España y que fue entregado a don Juan Carlos por el embajador de Guinea en Madrid. En este mensaje, según las mismas fuentes, el presidente Oblang pidió ver al Rey a ser posible antes de fin de año en una escala técnica a realizar en Madrid de camino a China y Corca del Norte.Pujalte anunció asimismo la próxima llegada a Malabo de¡ inspector de la Policía Nacional españoIa, general José Sáez de Santamaría, también con el fin de entrevistarse con el presidente ecuatoguineano. Martínez Pu jalte se limitó a comentar que la visita del general Sáez de Santa maría había sido solicitada hace tiempo por las máximas autoridades de Guinea Ecuatorial y que, en este momento, "se había considerado oportuno que se realizase". Fuentes de la Presidencia de la República de Guinea manifestaron que Sáez de Santamaría tratará en sus con tactos de incrementar "la coope ración hispano-guineana en ina teria de defensa y seguridad".

A este respecto, fuentes oficia les españolas han informado a EL PAIS que la visita del general español tiene por objeto "reforzar la presencia de España en Guinea Ecuatorial", un objetivo básico si se quiere que la cooperación española produzca resul tados positivos en aquel país y una petición que realizan en privado todos los funcionarios pro españoles del Gobierno de Malabo. Las mismas fuentes indican que ese reforzamiento se traduci rá en la presencia de fuerzas de la Policía Nacional en la República de Guinea Ecuatorial en virtud de los acuerdos de defensa y seguridad suscritos por los dos países. Ultimamente se ha especulado con la posibilidad de que miembros de la Policía Nacional española pasen incluso a formar parte de la guardia personal del coronel Obiang, cuya seguridad en estos momentos, y desde el derrocamiento de Macías, está a cargo de un destacamento marroquí A raíz del llamado golpe de la libertad, que puso fin a once años de tiranía y despotismo por parte de Macías, el nuevo líder guineano, Oblang Nguema, pidió al entonces ministro de la Defensa español, tenlente general Manuel Gutiérrez Mellado, el envío de un destacamento armado español para hacerse cargo de su seguridad personal. El Gobierno español perdió entonces una ocasión de oro para reforzar su presencia en Guinea y contestó con una negativa a la solicitud presidencial.

En la actualidad, se encuentra en Guinea un pequeño destacamento de policías nacionales -entre cuarenta y cincuenta- al mando de un capitán, con dos misiones específicas: la custodia de la Embajada de España y los edificios oficiales españoles y el adiestramiento de la policía de seguridad guineana.

La presencia efectiva ele la Policía Naclonal española en Guinea Ecuatorial podría servir de base a Oblang para llevar a cabo una profunda reorganización de la Administración pública de su país, cuyos puestos clave en estos momentos lo ocupan los antiguos miembros del llamado clan de Mongomo, pueblo natal de Macías y de Oblang, casi todos de conocidas tendencias pro soviéticas por haber sido educados en la URSS o en países Jel área soclall sta, como Corea del Norte.

Observaciones imparciales de Malabo han puesto de manifiesto que sin un apoyo decidido por parte de España, traducido en una presencia real como la que parece que ahora se pretende, Obiang se siente incapaz de dar un golpe de fuerza contra los miembros del clan de Mongomo por temor a ser depuesto por ellos, ya que en los momentos actuales los puestos claves de las fuerzas armadas y de seguridad se encuentran en manos de los hombres de Mongomo.

Igualmente, esa presencia real española se traduciría iiimediatamente en una mayor eficacia en todos los órdenes de la actual cooperación técnica que suministra España en virtud de los acuerdos suscritos entre los dos países y que, en la actualidad, no es todo lo positiva que podría ser.