Posible secuestro de una patrulla iraní en tierras de Cádiz

Un grupo, armado, al parecer de nacionalidad iraní, secuestró ayer al remolcador con base Cádiz a cuyo patrón obligaron a mano armada situarse junto a una lancha desconocida, a la que a continuación secuestraron Igualmente, y que resultó ser una de las tres embarcaciones iraníes que desde el pasado día 7 se encontraban en el puerto militar de Cádiz, en donde hacían escala, según una nota de la Oficina Diplomática del Ministerio de Asuntos Exteriores.Los citados individuos según la nota, abordaron la lancha iraní de fabricación francesa, a unas cinco millas del Puerto de Cádiz arrumbando a continuación al Sur observando el patrón del que la embarcación iraní se cricontraba dominada por los asaltantes. Unidades de la Armada, de superficie y aéreas vieron, siempre según la nota difundida por la Oficina Diplomática, que dos de las embarcaciones iraníes fondearon en Algeciras, y la tercera, al parecer la secuestrada por el grupo armado, entró en el puerto de Tánger.

Las embarcaciones iraníes se encontraban en el puerto de Cádiz desde el pasado día 7, con el fin de reabastecerse de agua, víveres y combustible, al igual que lo hicieran anteriormente en el puerto de El Ferrol, procedentes de Cherburgo y con destino a Irán.

Las patrulleras se hallaban situadas en las instalaciones del Mando Anfibio, en el puerto militar gaditano, entre dos buques de la Armada española, los también patrulleros Martín Alvarez (L- 12) y Conde Venadito (L-13), de forma discreta y sin que se pudieran ver desde los alrededores.

La base del Mando Anfibio, que cuenta con unidades de intervención inmediata, se encuentra en el barrio de Puntales, en un extremo de Cádiz, y sus instalaciones de atraque quedan situadas en la misma bahía, a escasas millas de la base de utilización conjunta hispano-norteamericana de Rota.

La dotación de las tres patrulleras iraníes se desconoce, aunque se estima en un centenar de personas, ya que durante su estancia en Cádiz la mayoría de los soldados iraníes estuvieron constantemente en la base, desarmados y con indumentaria militar; a pesar de lo cual, a algunos se les facilitó la documentación necesaria para poder salir al exterior, como es el caso de un marinero que fue ingresado en un hospital militar de la vecina localidad de San Fernando, aquejado de una afección ocular.

Según declararon a este periódico en fuentes que conocían la presencia de las tres embarcaciones en el puerto español -las autoridades españolas no lo comunicaron hasta ayer, a última hora de la noche-, resulta extraña la gran reserva con que se llevó la presencia en aguas españolas de estos buques y añadieron que, de tratarse de una visita oficial, se habría informado desde la Capitanía General, por lo que los buques hubieran atracado en los muelles comerciales de Cádiz, que es lo habitual cuando acuden a puertos españoles unidades navales de países con los que se mantienen relaciones diplomáticas, como es el caso de la República Islámica de Irán.