Francia estudia la evacuación de sus ciudadanos en Irán

La tensión irano-francesa creció ayer todavía más, cuando miles de teheraníes se concentraron ante la Embajada gala en Teherán para exigir la extradición del ex presidente Abolhassan Banisadr y del dirigente de los Mujaidin e Jalq, Massoud Radjavi, asilados en Francia. La manifestación se disolvió a última hora de la tarde.Las autoridades francesas siguen con preocupación el desarrollo de los acontecimientos y no se descarta la preparación de un plan de evacuación de los ciudadanos franceses, que en Irán superan el centenar. En todo caso, según fuentes oficiales de París, la evacuación no podría realizarse sin la cooperación de las autoridades de Teherán".

El pasado jueves, ante la embajada, situada en la calle de, Nauphle-le-Cháteau de Teherán, varios centenares de hezbollahi, seguidores del partido de Dios, comenzaron la manifestación y pintaron los muros de la embajada con eslóganes islámicos en los que se pedían las extradiciones.

Ayer, la cifra de manifestantes se incrementó. Los manifestantes habían sido previamente aleccionados por los dirigentes de la plegaria de los viernes, celebrada ayer en el campus de la Universidad de Teherán, en la que se celebraba el día por la liberación de Quod (Jerusalén). Los líderes religiosos instaron a las decenas de miles de asistentes a acudir ante la sede diplomática francesa y mostrar allí su rechazo hacia el Gobierno francés por haber autorizado el asilo político de Banisadr y Radjavi.

Durante la plegaria del viernes, Hachemi Raflanjani, presidente del Parlamento iraní, dijo que el Gobierno de París "se pone la máscara de socialista para cumplir los planes del imperialismo norteamericano y del sionismo". Rafsanjani acusó al Gobierno francés de falsedad.

Pese a la inquietud de las autoridades francesas, los manifestantes observaron ayer y el jueves un comportamiento comedido. Constantemente, los dirigentes de las asociaciones islámicas presentes en la manifestación recomendaron a los manifestantes que en ningún momento debían rebasar los muros de la embajada. En las inmediaciones se observaba la presencia de fuerzas del orden, que cerraron los accesos al recinto, mientras permitían el paso a los manifestantes previo registro.

A última hora de la tarde, los hezbollahi se retiraron de la legación francesa, pero sus portavoces manifestaron que, si el Gobierno de París no satisfacía las exigencias de extradición que pedían, continuarían sus manifestaciones y actos de masas.

Por otra parte, fuentes de la Organización de las Naciones Unidas señalaron ayer que el terremoto del pasado martes en la zona de Andoujerd, en la provincia suroriental de Kerman, ha podido causar ocho mil muertos. Hasta ahora se barajaba la cifra de cuatro mil víctimas.