ETA Militar niega su intervención en el atentado de Tolosa

ETA Militar ha negado tener relación con el atentado que costó la vida a dos jóvenes el miércoles, en Tolosa (Guipúzcoa), y causó heridas de extrema gravedad al hermano de uno de los fallecidos. El desmentido de ETA, que viene a aumentar la confusión en torno al caso, fue comunicado telefónicamcnte al diario Egin, horas después de que el Mando Unico Antiterrorista (MUA) atribuyera a las siglas citadas el doble asesinato. La convocatoria de partidos políticos y centrales sindicales a un paro de diez minutos, en contra del terrorismo, fue secundada ayer de forma irregular y no muy amplia en el País Vasco.

Según el Mando Unico Antiterrorista, existen hechos significativos que apuntan a ETA Militar como autora del atentado de Tolosa. En una larga nota, este organismo se refiere al tipo de munición empleada, al grito de Gora ETA Militarra (Viva ETA Militar) lanzado por los miembros del comando, que hablaban eusquera entre sí, y al momento de su ejecución, a plena luz del día. De acuerdo con esta nota, desde hace tiempo se tiene constancia de la presencia de un comando legal de ETAm en la citada localidad guipuzcoana. El atentado contra lo tres jóvenes vizcaínos, que habrían sido confundidos con policías, forma parte de una campaña de violencia indiscriminada, siempre según el MUA destinada a crear un clima de terror que facilite el cobro del llamado impuesto revolucionario, cuya exigencia se ha renovado últimamente en las provincias vascas.Sin embargo, una persona que se identificó a la redacción de Egin como portavoz de ETAm dio lectura, a última hora de la noche del jueves, a un comunicado en el que esta organización asegura: «No tenemos nada que ver en el asesinato de ayer en Tolosa, en el que murieron dos jóvenes, a cuenta de los mercenarios pagados... y que crea la confusión y el terror en Euskadi». El anónimo interlocutor pidió en nombre de ETA asistencia masiva a los funerales, y reivindicó para esta organización la autoría del atentado que costó la vida al coronel mutilado Luis de la Parra.

Santi Brouard, presidente del Partido Popular Socialista Revolucionario (HASI) y miembro de la mesa nacional de Herri Batasuna (HB), declaró ayer a Javier Angulo, en Bilbao, que «se trata de una maniobra destinada a desprestigiar a ETA y, de paso, a la izquierda radical que apoya la alternativa KAS». Para Brouard, nadie puede creer que haya sido ETA, como nadie puede creer la versión del MUA, máxime si se recuerda lo que en su día dijo de los asesinatos de Almería.

Las fuerzas políticas, en general, a la hora de emitir reacciones eluden pronunciarse sobre los autores del atentado, aunque ¡el Partido Socialista de Euskadi (PSE-PSOE) señala que "no se puede, como han hecho los concejales de HB de Tolosa, hacer depender la condena de las supuestas intenciones o motivaciones de los asesinos".

Arzallus: "No hay muertes justas o erróneas"

El Partido Nacionalista Vasco (PNV), en el que militaba Iñaki lbargutxi, uno de los fallecidos, rechaza la actuación de los «locos armados » y denuncia las acciones terroristas «tanto cuando son correctamente calculadas ( ... ) como cuando provienen de errores en cuanto a las víctimas causadas». En los ambientes nacionalistas, y en especial durante el funeral por Ibargutxi, celebrado en Miravalles (Vizcaya), fue perceptible el malestar provocado por la negativa de los concejales de HB de Tolosa a apoyar un comunicado de condena y la suspensión de las fiestas.

Xabier Arzallus, presidente del PNV, declaró a EL PAIS, en Bilbao, que «muertes ejecutadas de esta manera no son accidentales». Arzallus aseguró que el fanatismo quiere imponer sus soluciones en Euskadi a toda costa y negó que las víctimas de los atentados puedan clasificarse unas como justas y otras bajo el rótulo por error. Dijo también que el PNV no es amigo de la venganza, «pero sí que quisiéramos defendernos».

En cuanto al Partido Comunista de Euskadi (PCE-EPK), al que pertenece el herido, Pedro Conrado Martínez, ha anunciado que sus abogados se personarán en el sumario sobre el atentado de Tolosa para ejercer la acción popular contra sus autores. Se trata de la primera actuación de este tipo que se produce en Euskadi. El mismo partido se ref¡rió, en el momento de protestar por los asesinatos, a «la identidad de métodos y de resultados en la acción insidiosa de las tramas terroristas de ETA y la extrema derecha».

El paro de diez minutos convocado por el PNV, PSE-PSOE, PCE-EPK y EE, así como las centrales sindicales CC OO y UGT, en el País Vasco y Navarra, fue secundado de modo irregular en Vizcaya, Guipúzcoa y Alava, y tuvo una repercusión muy escasa en Navarra.

La convocatoria incluía la detención, a mediodía, de vehículos y transeúntes en la calle, además de la suspensión del trabajo, y había sido efectuada «Por la paz, la libertad, la democracia y contra el terrorismo y la violencia».

En Bilbao, quedaron paralizados el Ayuntamiento y la Diputación, las sedes de los partidos políticos convocantes y centros oficiales. Xabier Arzallus, presidente del PNV, permaneció los diez minutos en la calle en silencio. En algunos puntos céntricos se produjeron embotellamientos y ciertos conductores hicieron sonar el claxon, hasta que se les explicó el sentido de la detención.

En Guipúzcoa, la tónica fue la misma, pudo comprobarse que gran parte del público desconocía la convocatoria. El paro se reflejó en las instituciones y su entorno, así como en el centro urbano de San Sebastián, aunque de forma parcial. Dirigentes socialistas, entre los que se encontraba el secretario general del PSE, Txiki Benegas, cortaron el tráfico formando cadena en el puente de Santa Catalina, sin que se registraran protestas. En Tolosa, sólo un reducido grupo de personas se concentró en el lugar donde fueron ametrallados los tres jóvenes el miércoles.

En Vitoria, Carlos Garaikoetxea y los consejeros del Gobierno autónomo suspendieron a mediodía sus actividades, durante diez minutos, aunque sin descender a la calle. La mayoría de las emisoras del País Vasco hicieron a la misma hora cortes simbólicos en su programación, o emitieron música clásica.

Funeral en Durango

Unas 2.000 personas participaron ayer en la localidad vizcaína de Durango en el funeral celebrado en memoria de José Manuel Martínez Castaños, entre ellas el presidente del Parlamento vasco, Juan José Pujana, los consejeros del Gobierne vasco Javier Caño y Pedro Etxenike, y representantes de los partidos políticos PNV, Euskadiko Ezkerra, Partido Comunista y Herri Batasuna. El diputado Pedro Solabarría, de esta última coalición, ostentó la representación de HB.

El oficiante, en su homilía, dijo, entre otras cosas: «Quisiéramos que los autores hubieran tenido ocasión de contemplar despacio su obra y el encuentro de Imanol con sus familiares; estoy seguro de que en ese caso no repetirían jamás una acción como esa. Ojalá», añadió, «que Dios consiga ablandar los corazones de los violentos sacando el odio de su interior para que vuelvan al seno de la sociedad».

Finalizado el acto fúnebre, una parte de los presentes entonó el Eusko Gudariak, escuchándose un grito aislado de Gora ETA militarra. Acto seguido, varias decenas de personas iniciaron una manifestación por la villa lanzando gritos contra la policía y los incontrolados.