10 jefes y oficiales aspiran a dirigir la policía vasca

Al menos diez jefes y oficiales de las Fuerzas Armadas, la mayor parte originarios del País Vasco, aspiran a ocupar las cuatro plazas de mandos para la policía autónoma vasca, convocadas el martes pasado en el Boletín Oficial del Estado, según pudo saber ayer EL PAIS de fuentes de la Administración vasca de toda solvencia.

Los cuatro militares elegidos por el Gobierno vasco formarán parte del equipo de instructores de la Academia de Policía Vasca, que entrará en funcionamiento en octubre próximo y de la que en marzo de 1982 saldrán quinientos policías de seguridad y doscientos agentes de tráfico.Ha sido precisamente el notable retraso con que se ha efectuado la convocatoria de mandos lo que ha provocado las sucesivas reformas en el plan de etapas que el Gobierno vasco había previsto para la puesta en marcha de la policía autónoma.

En base a dicha convocatoria, realizada conjuntamente por los ministerios de Defensa e Interior (que tendrá su reflejo en el Boletín Oficial de las Fuerzas Armadas), en el plazo de veinte días recibirán ambos las solicitudes, que, recopiladas, se remitirán al Gobierno vasco, para que éste, en un plazo aproximado de cinco días, elija de entre la lista de aspirantes a los cuatro miembros de las Fuerzas Armadas que considere más aptos para hacerse cargo del mando de la policía autónoma.

Los candidatos

El Gobierno vasco, según ha podido saber EL PAIS, conoce hasta la fecha al menos diez jefes y oficiales del Ejército (capitanes, comandantes y un teniente coronel) en servicio activo -tal y como se exige en la convocatoria- que tienen la intención de aspirar a las plazas. Ninguno de ellos tiene mando en los cuerpos de seguridad del Estado. Por las referencias con que cuenta el Ejecutivo de Euskadi, la mayor parte de ellos son considerados como demócratas y liberales, y casi todos son nacidos en el País Vasco.Si no se produce ningún retraso en los trámites citados, para antes de que concluya el mes de julio habrán sido ya designados los cuatro mandos de la policía autónoma, que, en unión de una serie de profesores civiles, formarán también parte del cuerpo de instructores de la Academia de Policía Vasca, que el Gobierno vasco desea inaugurar el 5 de octubre próximo en Arcaute, localidad muy próxima a Vitoria. A la misma se incorporarán los aspirantes a policías (la convocatoria está abierta ya en las Diputaciones de Vizcaya, Alava y Guipúzcoa) que hayan superado previamente un examen de aptitud intelectual y física.

De dicha academia, y tras un curso de seis meses de duración, saldrá a finales de marzo o primeras semanas de abril de 1982 la primera promoción de la policía autónoma vasca, integrada por doscientos agentes de tráfico y quinientos policías de seguridad. Los primeros, junto a los cien miñones (policía foral de Alava), que ya realizan estas funciones en la actualidad, se repartirán por las carreteras de la comunidad autónoma vasca. El medio millar de policías tendrá en principio, dado su reducido número, casi exclusivamente funciones de custodia de edificios oficiales.

Antes de que finalice el primer curso en la academia parece que se podría realizar una nueva convocatoria de mandos y aspirantes para la segunda promoción de policías autónomos, que el Gobierno vasco desea esté integrada por mil hombres. Consideran los responsables del Ejecutivo vasco en materia de policía que con 1.500 hombres podrían ya asumirse algunas competencias en materia de seguridad y orden público, tales como patrullas de calles de ciudades y pueblos y vigilancia de actos públicos.