Discrepancias entre la UGT de Andalucía y la FTT sobre empleo comunitario
Cualificados dirigentes de la Federación de Trabajadores de la Tierra de UGT de Sevilla expresaron ayer a EL PAÍS su rotunda negativa a secundar la decisión de UGT de Andalucía de aceptar los acuerdos Junta-Gobierno sobre regulación de empleo comunitario. El enfrentamiento debería zanjarse en una reunión de alto nivel que tendrá lugar hoy en Sevilla.Los antecedentes inmediatos de este conflicto interno se sitúan en la firma del acuerdo entre la Junta de Andalucía y la Administración central, traducido en una posterior orden ministerial que dictaba nuevas normas reguladoras del empleo comunitario de los obreros del campo. En la propia Junta, el tema dividió a las fuerzas políticas, siendo aprobado por socialistas y centristas y pronunciándose en contra el PCA y el PSA.
Dos días más tarde, CC OO del Campo y la Federación de Trabajadores de la Tierra (FTT) de UGT de Sevilla hicieron público un comunicado conjunto en el que se rechazaba radicalmente el acuerdo por considerar, entre otros aspectos negativos, que era discriminatorio para la juventud menor de dieciocho años y restringía el disfrute del comunitario a un solo miembro de una familia compuesta por cuatro personas, o a dos, en caso de unidades familiares más numerosas.
Inmediatamente, la comisión gestora de UGT de Andalucía (la central socialista se encuentra desde hace meses sin comité regional), compuesta por tres dirigentes, desautorizó públicamente a la FTT sevillana, suspendiendo su acuerdo con CC OO y remitiendo el pronunciamiento definitivo sobre el empleo comunitario a la reunión que celebrarán hoy los ocho secretarios provinciales de FTT de Andalucía, los de Extremadura v la propia gestora de UGT-A.
Según pudo saber este períodico, la decisión de la gestora fue adoptada de forma unilateral y sin haber consultado con los miembros de la ejecutiva provincial de la FTT, que se habían pronunciado de forma unánime («nos enteramos de que éramos desautorizados cuando lo vimos en los periódicos», confirmaron algunos de ellos), lo que ha causado un profundo malestar entre los dirigentes jornaleros del sindicato ugetista.
Durante los últimos días se han sucedido diversos intentos y presiones por parte del PSOE y UGT para convencer a la ejecutiva de la FTT de la necesidad de aceptar las nuevas normas del empleo comunitario. «Nos dicen que le hacemos el al partido comunista, que votó en contra, pero lo que nos importa son los trabajadores, y ellos rechazan el acuerdo», indicaron las citadas fuentes. El propio secretario general de la FTT de Sevilla, Julián Chía, pese a su identificación con el PSOE, en el que milita, no estaría dispuesto a dar marcha atras.
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