Católicos y policías vuelven a enfrentarse en Londonderry
Nuevos enfrentamientos entre manifestantes católicos y fuerzas de policía se registraron ayer en el barrio católico de Bogside, en Londonderry (Irlanda del Norte), por séptimo día consecutivo. Un centenar de jóvenes se agrupó en las inmediaciones de la calle de Williams, del mencionado barrio, y lanzó bombas incendiarias de fabricación casera y piedras contra la policía, que permanecía allí junto a contingentes de soldados británicos, que cercaron el barrio católico.Según fuentes policiales, dos vehículos del servicio postal fueron incendiados por los manifestantes. Dos adolescentes murieron atropellados el domingo por la noche en Londonderry cuando un Land Rover del Ejército británico se precipitó contra ellos. Varios Policías resultaron heridos y buen número de edificios y vehículos fueron incendiados.
Irlanda conoce una escalada de enfrentamientos y de tensión, vinculados a la huelga de hambre iniciada el 1 de marzo por el detenido Bobby Sands, elegido como parlamentario de la Cámara de los Comunes de Londres y miembro del Irish Republican Army (IRA), que intenta por este medio conseguir el estatuto del preso político para él y todos sus compañeros correligionarios detenidos en la prisión de Maze, en Belfast.
La primera ministra británica, Margaret Thatcher, se negó ayer formalmente a recibir a los tres diputados de la República de Irlanda que quieren reunirse con ella para interceder por Bobby Sands.
En el transcurso de una conferencia de Prensa en Ryad, donde se encontraba ayer por la mañana, en visita oficial, Margaret Thatcher declaró: «No tengo por costumbre recibir a diputados de un país extranjero para hablar de un ciudadano del Reino Unido residente en el Reino Unido. Si ellos (los tres diputados) quieren hacerse oír, deben hacerlo a través de su Gobierno y por la vía habitual».
Sile de Valera, una de las parlamentarias irlandesas aludidas, dijo ayer en Dublín que era posible una solución «justa y honorable» para poner fin a la huelga de Sands.
